«El trabajo con amor a mí me dio resultado, el trabajar con el ser humano, pensando que en nuestras manos están seres que van a definir lo que vos le digas (…) si un docente viene renegado de su trabajo, de lo que le tocó, de lo que no quería hacer, entonces no es para la docencia, porque formamos personas, nos guste o no, si no nos gusta tenemos que buscar otra cosa. Tenemos un lema aquí que dice «Docente, siempre hay alguien que te está mirando», cuida tu forma de ser porque somos maestros hasta en el rinconcito de la casa, muchas veces no medimos lo que somos para los alumnos, estamos siendo mirados siempre» es lo que afirma y practica la profesora Urbana Gladys Florenciañi, con cada uno de sus estudiantes.
Florenciañi es una de las voces de la Educación en Contexto de Encierro, quien fue destacada «Maestra Ilustre» por el Ministerio de Cultura y Educación y representará a los profesionales docentes de la provincia, en el reconocimiento que el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de la Nación realiza a las educadoras y educadores de todo el país, en el marco del Día del Maestro.
La docente lleva 32 años al servicio de la docencia y hace 11 años que trabaja en la Modalidad Contexto de Encierro, que en palabras de Florenciañi: «Es un lugar complejo para quien no lo conoce» pero para quienes tienen un compromiso con la educación, y en este caso particular, con la formación de los que se encuentran privados de su libertad, es una experiencia enriquecedora, en la que la voluntad, el servicio y entrega la hicieron descubrir aún más el amor y vocación por la docencia.
«Todas las cosas que comencé a hacer fueron con mucho amor, pensando en cada una de las personas que están aquí detenidas, quiero decirle a la sociedad que no son extraterrestres porque salen de nuestras familias, son hijos, hermanos, tíos, parientes o vecinos de alguien (…) ahora vos salís a la calle y te encontrás con una persona violenta o vos te ponés violento y no sabes dónde terminás, porque la volatilidad de las emociones está al filo. Entonces no sabemos, así que cuando vine acá me encontré con que se podían hacer un montón de cosas y que las limitaciones están solamente en la persona y no en los espacios», recalcó la Especialista en la Educación en Contexto de Encierro, Prof. Florenciañi.
Actualmente se desempeña en el Núcleo Educativo y Formación Profesional N° 44, unidad educativa perteneciente a la Modalidad de Educación Permanente de Jóvenes y Adultos, donde se llevan adelante varios proyectos en función de las personas privadas de su libertad y familias y donde la docente se ha ganado el respeto y la admiración, tanto de sus estudiantes como de sus colegas por su alto compromiso y dedicación.
Ver un pizarrón, en las visitas que le realizaba a su padre en la Penitenciaría quien se encontraba allí a causa de un hecho trágico, la llevaron a investigar todo en lo concerniente a lo educativo en ese lugar y después ante la desgracia de su fallecimiento, decide trabajar y transformar el dolor en sabiduría y fortaleza, así lo explicó: «Fue obra de alguien que me puso en este lugar, no hubo momento en que yo dudé, fue instantáneo que yo dije esto es para mí, me gustó y empecé a trabajar (…) es una lucha diaria porque acá tenés que pelear con tu propia moral, con tu propia ética, es decir, si sos discriminador no podés venir a trabajar acá porque tenés que dejar eso de lado y ver a la persona, si vos ves al ser humano haces tu trabajo, si ves las causas no vas a poder hacerlo. Ellos son muy perceptivos, se dan cuenta enseguida quién es la persona que tiene afectos y entonces, ellos se prestan para el trabajo».
Nadie dijo que ser docente fuera tarea fácil, más allá de educar para contribuir a la transformación social, los tiempos actuales y modificaciones constantes a los cuales se enfrenta el área educativa, requiere de profesionales innovadores y capacitados para afrontar los desafíos, siendo el amor por la docencia más fuerte que las adversidades.