Directivos de establecimientos educativos brindaron precisiones sobre los protocolos sanitarios para el regreso a las aulas, a la vez que remarcaron que la asistencia alimentaria a los estudiantes “es una gran ayuda para las familias”.
Rubén Flores, director de la EPES N° 72 del barrio Bernardino Rivadavia, celebró que este miércoles y bajo estrictos protocolos de bioseguridad, los alumnos y alumnas puedan retornar a clases bajo la modalidad semipresencial.
“Se trabajó mucho con el protocolo sanitario, la organización de los espacios curriculares, el diseño de los encuentros, los talleres y apoyaturas. Realizamos reuniones con los tutores, madres y padres”, indicó el docente.
Detalló que las clases serán en dos módulos, uno para el Ciclo Básico y otro para el Ciclo Orientado, con una duración de 40 minutos por espacio curricular, el máximo de asistentes es de 10 personas por aula, respetando el distanciamiento de 2 metros, y la higiene antes, en elintermódulo y después de los encuentros.
Por su parte, Mirtha Bernardini, directora de la EPEP N°217 “Paula Albarracin”, comentó que durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio “se trabajó vía WhatsApp, con videos, o en formato papel –hay maestras que llevan los trabajos a los niños que no tienen conectividad- además de los cuadernillos pedagógicos de Nación y Provincia”.
En este contexto, subrayó que el comedor escolar “no dejó de funcionar ni lo dejará” y que asisten a los niños y niñas, de lunes a viernes, de 11.30 a 12 horas. “Los tutores buscan la vianda correspondiente a sus niños. De nuestra matrícula de 92 alumnos, tenemos aproximadamente 78 comensales diarios, además se les entrega copa de leche, que en este caso es la caja de leche mensual que nos provee el Gobierno de Formosa y es una gran ayuda para las familias”.