Al destacar la concreción con fondos propios de la provincia del atractivo Parque Acuático en el barrio Eva Perón, núcleo de la Jurisdicción Cinco, la ministra secretaria general del Poder Ejecutivo, Cecilia Guardia Mendonca, manifestó que “no es virtual”, en alusión a la “pileta” pintada que habilitó el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta.
Aludió a que el gobernador Gildo Insfrán encabezó el primer día hábil del año la inauguración del imponente espacio recreativo, sobre el cual significó que se trataba de un emprendimiento enmarcado en la igualdad de oportunidades para todos los formoseños, asegurando que su gestión mantendrá realizaciones que necesita la comunidad provincial, a pesar de la ausencia nacional para encarar trabajos esenciales para los habitantes.
En ese marco, la ministra Guardia Mendonca destacó que en la inauguración “sólo hubo alegría y algarabía por parte de los chicos, quienes pudieron compartir una hermosa jornada y todos juntos formamos parte de esta hermosa inauguración que realizó el gobernador Insfrán”.
“Este es un enorme esfuerzo que hizo el Gobierno provincial porque todo esto fue construido pura y exclusivamente con fondos propios de la provincia”, valoró la funcionaria, haciendo notar, categórica, que “esto no es virtual”, aludiendo así la falsa “pileta” –un espacio pintado de azul- que Rodríguez Larreta inauguró el verano pasado en “Buenos Aires Playa”.
Cabe recordar que Rodríguez Larreta no tuvo mejor idea que sumar una falsa “pileta” para contener los juegos de agua para los más chicos. Si se lo miraba desde arriba parecía una verdadera piscina, pero sólo era un espacio pintado de azul. La obra generó enojo en los porteños y en las redes sociales le dijeron de todo al funcionario macrista.
En el extremo contrario, el atractivo Parque Acuático inaugurado en Formosa es imponente, ya que la obra es parte de un proyecto integral recreativo que abarca casi nueve hectáreas de intervención. El sector de piletas recreativas se desarrolla sobre la avenida Raúl Alfonsín en una superficie de intervención de una hectárea y media, distanciándolas de las restantes actividades del parque, de manera de lograr una mayor intimidad para el desarrollo de la misma.
Las inmensas piletas se plantearon de acuerdo a tres clasificaciones etarias o condiciones de usos con una capacidad máxima de un millar y medio de personas y con una infraestructura adicional de espacios de solárium y juegos para un millar de personas más, completando un total de dos millares de asistentes en todas las instalaciones.