El ministro de la Comunidad, Aníbal Gómez, acaba de lanzar el ciclo 2016 de una iniciativa de connotaciones estrechamente vinculadas a la festividad navideña y gestos de solidaridad que derivan de ella: Se trata de la elaboración de panes dulces a cargo de madres y sus hijos que asisten a comedores comunitarios, producto que luego tienen como destino a los abuelos y niños que son asistidos en hogares del estado.
Y justamente por estas jornadas tiene sus primeros pasos el desandar de esta propuesta gestada hace ya una década en el seno de la asociación civil “Unidad, Esfuerzo y Trabajo”, quien en sus comedores de los barrios La Colonia y Venezuela, reúne a madres reposteras que junto a sus niños elaboran los tradicionales panificados, a efectos de compartir con otros chicos de la ciudad, entre ellos discapacitados y adultos mayores.
“Esto lo hacemos hace ya diez años con el respaldo del gobierno a través del ministerio de la Comunidad, -según señala Arminda Quiñónez, la presidenta de la asociación-, y por eso agradecemos al señor ministro Aníbal Gómez que haya venido a compartir este lanzamiento del ciclo solidario 2016”.
Fue en el comedor del barrio La Colonia, donde en medio de un enorme entusiasmo de los niños, quienes junto a sus madres se pusieron manos a la obra para elaborar y hornear los primeros panes dulces. “Tuvimos una respuesta espectacular en esta etapa inicial de capacitación, lo que nos hace presumir el éxito al momento de comenzar la meta de producirlos en una cantidad importante y llegar con los pan dulce a los abuelos y muchos niños de la ciudad”.
Aludió a lo gratificante de ver la alegría de nuestros “niños panaderos”, tanto al amasar junto a sus madres como al ver que salen del horno el producto terminado, y estimo que lo será aun mas cuando en días previos a Navidad lo entreguen a otros chicos o compartan una merienda en el marco de una jornada inter-generacional con abuelos.
Señaló la dirigente comunitaria que la propuesta está enmarcada en las acciones que a través del programa de “política alimentaría y calidad de vida” vienen desarrollando, y que posibilita además que las madres reciben capacitación en cocina para la elaboración de platos con productos de alta demanda. Ahora se involucró a sus hijos en esta iniciativa, a quienes de manera didáctica-pedagógica se les viene brindando conocimientos para que elaboren dos productos de gran consumo en esta época como los panes dulces”.
Aludió que se trata de una de las muchas acciones que propician, en este caso con el apoyo del gobierno a través del ministerio de la Comunidad que acompañan personalmente y aportan los insumos, y que incluso en similares características se replica en con madres y niños de otros comedores de la ciudad.