Cada 6 de enero es un día de ilusión, de levantarse corriendo a abrir los regalos que los Reyes han dejado. Sin embargo, no todos los niños están con sus padres en su casa, muchos pasan estos días en el hospital y los Reyes tienen que ir para dárselos en mano. Es por eso, que el ministro de Desarrollo Humano de la provincia Dr. José Luis Décima y su equipo de trabajo quisieron estar cerca de las familias en ese día tan especial. La respuesta llenó el corazón: gestos de agradecimiento y pequeños rostros sorprendidos y felices, más allá de cualquier padecimiento de salud.
Sorpresa
Después de visitar las casas los Reyes han llegado a los hospitales. Tanto en las salas de la Madre y el Niño como en el área de pediatría del Hospital de Alta Complejidad «Pte. Juan Domingo Perón» los nenes y nenas ingresados los han podido ver de cerca. La gran mayoría no se lo esperaba, pensaba que ese día sería uno más, pero no fue así: Melchor, Gaspar y Baltazar, guiados por el ministro Décima por los pasillos de ambos nosocomios brindaron una sorpresa especial y distribuyeron juguetes.
En cada una de las ocasiones en que funcionarios y pacientes tienen contacto de primera mano, se conocen nuevas historias, muchas conmovedoras, y el agradecimiento está por sobre todo. Pero se trata de un ida y vuelta: «Ellos dan las gracias pero soy yo quien les agradece a ellos, a las familias, por su fortaleza, por su responsabilidad de cuidar a sus niños, de seguir las indicaciones médicas, por sus ganas de estar mejor, porque eso es fundamental más allá de toda ciencia, el estado anímico cumple una función esencial en el proceso de recuperación de los pacientes», expresó el ministro Décima.
Entre los agasajados que recibieron la visita de los Reyes Magos en su habitación, se encuentra el pequeño Adrián, quien acompañado de su madre emocionada, los ha visto y ha abierto sus juguetes. Un día en el que recuperan la ilusión para ponerse mejor de salud lo más pronto posible.
Los padres también aportaron a la parte emotiva. «No imaginábamos tan linda sorpresa y que el ministro nos venga a visitar en este día; él debe tener familia y quizás podría estar con ellos hoy pero vino a estar con nosotros, a traerle regalos a nuestro pequeño internado y también nos dejaron para nuestros otros niños que quedaron en casa y que nos esperan. Tenemos sorpresitas para llevarles y eso nos pone felices como padres», valoró uno de los padres proveniente de Ingeniero Juárez.