Desde la cartera de Salud provincial advierten que en épocas de calor es más frecuente la intoxicación por alimentos en mal estado o que no respetan la cadena de frío
Con las jornadas de intenso calor las intoxicaciones de tipo alimenticias son más comunes, explicaron desde la cartera Sanitaria provincial y brindaron una serie de consejos a tener en cuenta en el hogar para resguardar los alimentos y cuidar la salud de toda la familia.
“En los meses de calor debemos extremar cuidados en el consumo de alimentos para evitar las intoxicaciones que se originan por consumir los alimentos en mal estado. Esto se produce debido a las elevadas temperaturas y la inadecuada conservación y manipulación de los productos”, indicaron.
En este sentido profesionales del área de nutrición indicaron “durante el verano las bacterias, levaduras y mohos invaden los diferentes alimentos que son manipulados y conservados incorrectamente, dando inicio a una posible intoxicación al momento de su consumo”.
Esto se debe a que “en los días de más calor –que suelen coincidir con las vacaciones– nos salteamos horarios y comemos fuera de nuestra casa, descuidando algunas medidas de higiene que favorecen el crecimiento de microorganismos y hacen que la cadena del frío se rompa con más facilidad”.
Según detalló, los alimentos que más cuidados requieren son: las carnes, quesos, salsas y cremas, mayonesa, preparados con huevo, pescados y frutas, así como verduras cortadas.
De la misma manera, las comidas cocinadas tampoco deben dejarse a temperatura ambiente por más de dos horas: “Si la sobremesa se ha alargado con la comida aún sobre la mesa, es mejor tirar las sobras. Si se han guardado en el heladera a tiempo, se deben consumir antes de tres días y calentarlas por completo antes de comerlas”.
Cadena de frío
Nutricionistas brindaron una serie de recomendaciones para no romper la cadena de frío de los alimentos: Descongelarlos siempre dentro de la heladera y no recongelarlos una vez descongelados.
Cuando se compran los alimentos, elegir productos perecederos frescos o congelados en el último momento antes de llevarlos a casa, para no romper la cadena de frío.
No comprar ni consumir alimentos perecederos en venta ambulante, especialmente aquellos que contengan huevos, salsas o derivados. En caso de elaborar mayonesa casera y salsas o cremas, hechas con huevos frescos, consúmalas inmediatamente y no guarde los restos.
No cargar en exceso la heladera para que el frio llegue a todos lados y evite abrirla frecuentemente, además de mantenerla lo más limpia posible. Observar el color y olor de los alimentos antes de prepararlos, cualquier cambio constituye una señal de alarma.
No dejar mucho tiempo a temperatura ambiente los productos delicados, guardarlos inmediatamente en la heladera después de usarlos. Lavar adecuadamente las frutas, verduras y hortalizas antes de su consumo. Manter los productos químicos e insecticidas separados y alejados de los alimentos.