Desde la Defensoría del Pueblo se informó que si bien ya es oficial la eliminación de aranceles para computadoras y productos tecnológicos, se advirtió a los consumidores que este beneficio no alcanza a las compras de particulares en el exterior y para los mismos continua rigiendo el tope de USD 300 por año libres de impuestos. Ante esto no es menos cierto que constituye un beneficio para los usuarios de computadoras y equipos informáticos, pero al mismo tiempo pone en alerta a empresarios y sindicatos de un sector de la economía.
Se prevé que la medida provocará una fuerte baja de los precios, que en algunos casos podría llegar hasta un 50 por ciento.El arancel para importar computadoras, notebooks y tablets bajará de 35 a 0 por ciento. Con estos cambios, en el Gobierno Nacional se espera que los valores de venta sean similares a los que se consiguen en las grandes cadenas de electrodomésticos de Chile, hacia donde viajan todos los fin de semana miles de argentinos atraídos por las diferencias de precios. También presagian que habrá una mayor oferta de productos e ingresarán al mercado modelos que hasta ahora son difíciles de conseguir.
Entre los considerando del decreto 117/2017, publicado en el Boletín Oficial, se afirma que la medida «redundará en la disminución de los costos de fabricación de diversos aparatos y equipos electrónicos, mejorando las condiciones de competitividad y productividad, y contribuyendo al aumento de la inversión productiva en el sector y de su disponibilidad en el mercado local».
El decreto abarca la importación tanto de computadoras portátiles como accesorios informáticos y de telecomunicaciones que, desde hoy, quedaron exentos del pago de derecho de importación.La decisión causó malestar entre los empresarios y sindicatos del sector, que desde hace algunos meses vienen denunciando una baja pronunciada en las ventas y la pérdida de puestos de trabajo. Hay informes privados que indican que desde que se anunció la medida unas 2000 personas se quedaron sin empleo.Una de las afectadas es la planta de la empresa PC Arts Argentina, que controla la marca Banghó; su producción fue paralizada y el gremio que representa a sus trabajadores, la UOM ya se movilizó para protestar por la pérdida de puestos laborales.