El ministro de la Comunidad, Aníbal Gómez, revelo que con base de operaciones en Ingeniero Juárez, se mantiene el importante despliegue asistencial para llegar con ayuda a unas 1300 personas habitando comunidades aisladas por las aguas en el extremo oeste formoseño.
Indico que alude a las familias, poco mas de 260 que totalizan ese millar trescientas personas habitando parajes aborígenes y criollos del oeste, en la franja de influencia de un elevado rio Bermejo. Aunque el mayor problema radica en las precipitaciones extraordinarias de las últimas semanas en toda la zona a lo que se suma las riadas que bajan por cañadas y bajo desde territorio salteño, generando los pronunciados cortes de rutas como la 9 y 39 y también caminos vecinales.
Puntualizo que esta situación dejo aisladas a varios parajes, como Nueva Misión Pozo Yacare, la Vieja Misión Yacare, Campo Grande, Pozo la Piedra, La Corzuela, Santa Rita, Mistolar, Bolsa Palomo, Isla Ponce, y también a los asentamientos dispersos de productores en la zona conocida como La Florencia. “Ante la imposibilidad de acceder por tierra con la asistencia a las familias, es que se dispuso que opere un helicóptero, activándose un puente aéreo de ayuda, que en estos últimos dos días transporto más de cinco tonelada de víveres (incluyéndose carne y leche), medicamentos, pastillas potabilizadoras de agua y frazadas”, preciso.
Señalo asimismo que también se dispuso que viajaran dos medicas para atender a determinadas personas y hacer un diagnostico acerca del estado sanitario de las poblaciones, que se indico en general no hay mayores problemas, de todos modos se mantendrá la vigilancia preventiva.
Del otro extremo, hacia la zona de influencia del rio Pilcomayo, existen también dificultades similares, por lo que se estableció otro frente de asistencia, aunque en este caso y aun con caminos intransitables, se abrieron sendas alternativas que permiten llegar con ayuda.
Asimismo, Gómez indicó que en la localidad de Ingeniero Juárez, que aun no logra superar completamente las enormes lluvias que genero anegamientos de muchos barrios, se mantienen habilitados cerca de una veintena de comedores comunitarios.