Sostenida evolución tienen los trabajos de nuevas plantas de agua potable en varias localidades del interior, que sumadas a otras obras de ampliación u optimización de los servicios ya existentes, permitirán producir 1,2 millones de litros hora en la totalidad de estas.
Una de las terminadas y en fase de prueba de todo su sistema es la obra de optimización de la planta de Villafañe (100 mil litros/hora), la que superada el proceso de ensayo en pocos días más, estará operativa en un ciento por ciento.
Otras dos muy avanzadas y que se estiman podrán estar concluidas y pasando a la etapa de pruebas a fines del próximo mes de julio son las nuevas plantas de agua potable de Comandante Fontana que tendrá una capacidad de producir 200 mil litros por hora y la de General Güemes con potencial a generar 100 mil litros/hora de agua potable.
El informe, proporcionado por el administrador general del Servicio Provincial de Agua y Saneamiento (SPAP), ingeniero Julio Cesar Vargas Yegros revela que “además tenemos otras obras en construcción en importantes estado de progreso, como las nuevas plantas potabilizadoras de Las Lomitas (400 mil litros/hora), General Mansilla (150 mil litros/hora) y también los proyectos de ampliación de las plantas potabilizadoras de Palo Santo (150 mil litros/hora) y la de Laguna Yema (100 mil litros/hora). Se suma la nueva planta de la localidad de General Belgrano, que cuando entre a funcionar podrá producir tres veces más la cantidad de litros por hora de agua potable actual y podrá satisfacer la actual demanda, como así también la futura que tenga esta comunidad para las próximas dos décadas.
Dijo asimismo, que en pocos días más se estará activando en torno al proceso administrativo-legal para avanzar en una nueva etapa de la obra ya en ejecución diseñada para Las Lomitas, que dada su magnitud se avanza en determinadas fases ya proyectadas con anterioridad. Asimismo, se indico que de manera simultánea se trabaja en todo el proyecto para la nueva planta de agua potable para la localidad de Ingeniero Juárez, con la idea de que este año se pueda estar haciendo el llamado a licitación para esta obra de gran magnitud.
Tomando la capacidad de producción actual de agua potable en todo el territorio formoseño, se cuantificaran en más de 310 millones de litros diarios, que por supuesto ira en ascenso una vez que las nuevas plantas estén operativas. Todas tienen un común denominador: “Se ejecutan íntegramente con fondos provinciales y están diseñadas para un horizonte de crecimiento poblaciones de 20 años”.
Destaco asimismo que “debemos valorar en toda su dimensión estas realizaciones. Y no solo por el impacto que conlleva en la población toda obra de saneamiento, sino porque se tratan de millonarias inversiones de recursos propios del estado provincial en un contexto muy complejo del país por las políticas nacionales actuales”.
Impacto social
Se significa en esferas del organismo responsable de las acciones en materia de saneamiento, que “esta mejora superlativa en este fundamental servicio, tuvo un impacto directo en la mejora de los indicadores sociales más sensibles”.
Así lo ratifico Vargas Yegros, quien acentúo acerca de la acción de la gestión (Gildo) Insfran “para promover la realización plena de la familia a través de obras y medidas que apuntan fundamentalmente a promover el desarrollo humano”. Se recordó que en el año 1996 se producía 51.200 metros cúbicos diarios, ya a la fecha se supero los 310.000 metros cúbicos por día, sumado a ello y en el caso de las cañerías el desarrollo supera el 103% y en cuanto a las conexiones se mejoro en un 65%
“Esto permitió que la cobertura con este vital servicio alcanzara a casi el 90% de la población, para lo cual ha sido fundamental las 66 plantas de agua potable y la decena de centros de distribución activas en todo el territorio provincial”, destaco el administrador del SPAP.
“Incluso en materia de cloacas se avanzo muchísimo: Fíjese que en Clorinda se llego a más del 70% de cobertura, en El Colorado a casi el 60%, en Laguna Blanca un 83% y en la ciudad capital un 65%, o sea una mejora muy pronunciada respecto a dos décadas atrás donde era mínima la cobertura en saneamiento”, amplio el administrador del SPAP.
Insistió en marcar la enorme transformación que ha tenido el servicio de saneamiento en general y el agua potable en particular. A modo de “ejemplos emblemas” de lo que ha sido la transformación del sector, señalo las plantas de agua potable y redes de distribución de Formosa y Pirane, la de Clorinda en marcha.
Sostuvo que “el acceso al agua potable y obras de saneamiento, son también prioridades de nuestro gobierno, atento a su impacto en la salud y calidad de vida de la población”, aludiendo a que “por eso continuaremos con la construcción de nuevas plantas potabilizadoras y obras de mejoramiento de diversa índole en casi todas las localidades”.