Se renovaron nuevamente los reclamos y quejas de vecinos de distintos puntos de la ciudad, por los inconvenientes que surgen ante las últimas lluvias que se vienen produciendo en todo el NEA y a la cual no escapa nuestro territorio provincial, expuso la Defensoría del Pueblo de la provincia.
Amplio señalando que “los propios vecinos montaron “barricadas” en las calles por donde transitaban transportes públicos de pasajeros, ya que a su paso, producían gran cantidad de ingreso de agua dentro de las viviendas.
Ello llevó a que el servicio sea provisoriamente suspendido, y se pudo observar gran número de usuarios esperando en las distintas garitas del microcentro”.
En este sentido, el Ombudsman José Leonardo Gialluca, señaló que “el ministerio de Planificación, Inversión, Obras y Servicios Públicos junto al ministerio de la Producción y Ambiente, además de los municipios, es significativo ahora que tomen nota de donde se produjeron los eventos más perjudiciales, una vez que cesen las lluvias, para posteriormente llevar a cabo las obras más urgentes que sean posibles, teniendo en cuenta la escasa pendiente que tiene nuestro suelo”.
Amplio diciendo que “como respuestas a la acumulación de aguas; y en este sentido institucionalmente, buscando una solución de fondo, hemos requerido al ministro de Ambiente de Nación a cargo de Sergio Bergman, que coordine con las autoridades provinciales y municipales, para la realización de los acueductos necesarios con importantes estaciones de bombeo ubicadas estratégicamente que permitan evacuar grandes cantidades de agua en un corto lapso de tiempo y todo ello como medida que permita respuestas a largo plazo, ya que nos enfrentamos a un “ciclo húmedo” que tendremos que soportar este y el próximo año, estando previsto luego una época de fuerte sequía”.
“Es que en las inundaciones se conjugan causas naturales y humanas. Entre los factores naturales se encuentran los geográficos y los meteorológicos. El aumento de las precipitaciones es otro factor natural que hace que se saturen los reservorios del subsuelo y se eleven así las napas, provocando mayores inundaciones”, sostuvo.
Por otro lado, subrayo que “la menor altura de la ribera derecha de los ríos Paraná y Paraguay, permite el desborde de las aguas hacia las provincias de Formosa, Chaco y Santa Fe, entre las causas por acción humana, las inundaciones se producen cuando se intervienen en los sistemas naturales sin conocer las características del sistema y sin evaluar las consecuencias. Por ejemplo, eso sucede ante el crecimiento descontrolado de las ciudades, ante el insuficiente y escaso mantenimiento del sistema de desagüe pluvial, el relleno y ocupación de franjas costeras que dificultan aún más el drenaje, así como con el desmonte y la sojización, entre otros”.
En lo que hace a la disposición de residuos, “se pidió a todos los vecinos y comercios hasta que los mismos puedan ser recolectados, mantenerlos en distintos recipientes cerrados y no sacarlos a la calle, puesto que es aquí donde, son arrastrados por el agua, también destruidos por los animales y ello lleva a que los desagües de todo tipo funcionen incorrectamente y agraven más la situación que vivimos”.
Desde el Organismo de la Constitución se denunció que “ las inundaciones son el mayor desastre natural que amenaza actualmente a la Argentina y la cantidad e intensidad de las precipitaciones se han incrementado sustancialmente, con lo que se explica la magnitud de los desastres actuales, siendo que en las ciudades donde viven nueve de cada diez Argentinos, “los anegamientos son el principal problema ambiental y siendo los pobres y vulnerables las mayores víctimas”.
“Todo esto a causa de que las urbes se han expandido sin la planificación y las obras necesarias, siendo que la pavimentación y construcción de edificios hace que las tierras se transformen en impermeables, disminuyendo las posibilidades de infiltración y aumentando la acumulación de agua en los sistemas de alcantarillado y en las calles, viéndose reducir nuestra vegetación disminuye también la capacidad de evapotranspiración. Todo ello hace que el costo estimado de la degradación ambiental, entre las inundaciones y el resto de los problemas, represente un 8,15% del PBI de nuestro país”, se expuso concluyente.