Evocando la promulgación de la ley 14.408 que declaró Provincia al Territorio Nacional de Formosa , el gobernador Gildo Insfrán fue quien tomó la decisión política de establecer el 28 de junio de cada año como fecha histórica provincial y fiesta cívica formoseña.
Lo hizo a través del decreto 1361 del año 2005 en coincidencia con la celebración del Cincuentenario de la gesta de un grupo de ciudadanos formoseños que logró el objetivo de alcanzar la jerarquización institucional del entonces territorio tras entrevistarse con el entonces presidente de la Nación, general Juan Domingo Perón.
El gobernador explicaba que decidió establecer el 28 de junio como fecha histórica provincial y fiesta cívica formoseña, “en homenaje a los protagonistas de aquella gesta y como mandato que nos otorga la historia de fortalecer nuestra identidad compartida, en comunidad, integrándonos definitivamente mediante el reconocimiento y afirmación de lo propio”.
Insfran interpretó que ese acontecimiento de 2005 en coincidencia con los 50 años de aquella fecha en la que Formosa nace a la vida institucional en su carácter de Provincia, representaba una ocasión propicia para revalorizar el sentimiento de los formoseños en su lucha por un ideal de provincia y la construcción de una comunidad organizada, conducida y gobernada por hijos de esta tierra.
Consideraba el gobernador que la fecha que se conmemoraba, ligada íntimamente a la identidad propia , recordaba de manera constante a los habitantes de esta tierra “ como nuestra bandera, que somos parte de algo, da sentido de pertenencia, nos trasciende e inserta como pueblo en el devenir de la historia”.
Apuntaba el doctor Insfran que la provincialización de Formosa implicó la concreción del proceso histórico-político formoseño, jalonado en la perseverancia por adquirir el reconocimiento de la Nación y el pleno ejercicio del gobierno. Este, se remonta al 8 de abril de 1879, con la fundación de Villa Formosa como capital del Chaco Argentino, continúa el 16 octubre de 1884 con la creación del Territorio Nacional de Formosa, mediante la sanción de la ley 1532 y culmina el 28 de junio de 1955.
Entendía, entonces, que ese reconocimiento fue posible en el marco del desarrollo de un modelo de Nación federal, enraizado en los principios del Movimiento Nacional y Popular, y encarnado en el Gobierno del General Juan Domingo Perón, quien comprendió la lucha justa y digna de los formoseños de entonces por ser protagonistas de su destino y constructores de su historia.
En ese instrumento histórico suscripto por el actual titular del poder Ejecutivo, hacía notar que el acontecimiento evocativo de la provincialización encuentra a un pueblo maduro, que enfrentó y superó las adversidades que se presentaron en el camino, templando y fortaleciendo su espíritu en los más difíciles momentos que vivió la Nación toda, sostenido por la firmeza de su fe y su inquebrantable esperanza.
El doctor Gildo Insfran resaltaba que la Provincia soñada por sus gestores, silenciosa y efectivamente la están concretando los hijos de esta tierra; transitando un proceso de construcción colectiva que afianza el despliegue pleno de nuestras potencialidades, tarea que los formoseños llevamos adelante con un profundo compromiso militante y creativo identificados con la defensa del bien común a través de la práctica de la solidaridad, la unidad y la organización.
Estimaba que ese momento histórico proponía a los formoseños el desafío de seguir construyendo la historia desde lo que somos, con nuestros valores, convicciones, sueños y anhelos; para que desde allí y con la protección de la Virgen del Carmen, protagonicemos la irrenunciable lucha por consolidar una Patria socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana.
En ese contexto, consideraba necesario poner en valor las efemérides que marcaron con hitos las conquistas del pueblo formoseño, para explorar, indagando el pasado, razones y fundamentos esenciales de un futuro promisorio y apelando a la historia reconocer el presente mirando con optimismo el rumbo fijado en el Modelo Formoseño para el Proyecto Provincial.
En ese sentido, recurría a la mención de otros decretos que exaltan fechas históricas y símbolos de nuestra provincia, acudiendo a la afirmación de nuestra identidad formoseña, simiente que dio sustento y sentido al destino común de sus habitantes y que fundamenta su existencia.