Niños y jóvenes que asisten a todos los niveles educativos de la provincia continúan profundizando información acerca de las medidas que tienden a eliminar de las casas el mosquito vector de la enfermedad del dengue, el Aedes aegypti.
Esto es concretado por equipos especializados de profesionales y agentes del ministerio de Desarrollo Humano formoseño que recorren los jardines de infantes, escuelas primarias y secundarias donde difunden dichos cuidados por medio de charlas de concientización con exposiciones y demostraciones adecuadas a cada grupo etario.
En esta oportunidad, la charla tuvo lugar en la EPEP 526 “Héctor Sorsaburu” del barrio Antenor Gauna, ubicado en la zona de la circunscripción cinco capitalina. También estuvieron presentes: padres, docentes y directivos.
Escolares del primer ciclo (1°,2° y 3°) participaron activamente de este nuevo encuentro en el que reforzaron las estrategias para evitar la formación de criaderos de mosquitos y otros tantos hábitos que deben concretarse en el propio hogar y en otros espacios frecuentados de manera cotidiana por las familias: clubes, lugares de trabajo, plazas, veredas y espacios comunitarios.
Acciones hogareñas
Mediante múltiples explicaciones, el equipo difundió de forma didáctica las principales medidas que deben cumplimentarse en los lugares mencionados, teniendo en cuenta los hábitos domésticos que caracterizan al mosquito y su preferencia por vivir, poner huevos y reproducirse en objetos de uso común que tenemos en las viviendas.
Entre los puntos expuestos se resaltó una vez más que este insecto se reproduce en sitios donde se acumula agua limpia, quieta y con sombra, y que los lugares o recipientes con dichas cualidades “son muy frecuentes de encontrarse en las casas”, tanto en el interior como en los patios y veredas.
Al respecto insistieron en que “para que la prevención sea efectiva, todos debemos participar. Cada integrante de la familia debe ocuparse de algunas de las medidas y para eso es fundamental repartir tareas. Por lo tanto, también los niños deben colaborar en sus casas”, apelando asimismo “al efecto multiplicador que tienen los chicos en sus hogares cuando comparten con sus padres y familiares lo aprendido en la escuela”.
Cabe destacarse que además de la información brindada en detalle y minuciosamente, el equipo de salud amplió la charla con videos instructivos, demostraciones manuales, láminas, títeres y con la entrega de materiales gráficos educativos para colorear.