Como es habitual, vecinos originarios del barrio Namqom fueron alcanzados con una nueva visita del equipo del centro de salud del lugar para ofrecerles en sus propios domicilios distintas atenciones, vacunación y otros tantos servicios disponibles de manera gratuita.
Profesionales y agentes del efector, recorrieron las casas y dialogaron con las familias. El hincapié fue puesto en el control de los carnets de vacunas y la aplicación de las dosis faltantes según lo establece el calendario vigente para los grupos etarios y con condiciones especiales de salud, asegurando así a personas de diferentes edades “la protección por medio de las vacunas frente una serie de enfermedades”, explicaron los referentes del servicio de vacunación.
A lo anterior, se sumó la captación de pacientes pediátricos para controles en el centro de salud con turnos programados, priorizando los niños con factores de riesgo y los que “en las últimas semanas no habían asistido a las consultas que ya tenían agendadas por algún motivo particular”. Lo importante “es hacer la reprogramación para que ningún niño se quede sin su debido control”, aseveraron los médicos.
Por otra parte, se hizo lo propio con los pacientes adultos que sufren de enfermedades crónicas -diabetes e hipertensión- “el seguimiento a los diagnosticados con estas patologías es periódico y regular porque son pacientes que deben estar controlados para evitar complicaciones que deriven en otras enfermedades más severas”.
En la charla con las familias, el equipo insistió asimismo en la concientización de hábitos saludables que fomentan una mejor calidad de vida, que promueven la buena salud en todas las edades y que contribuyen a evitar enfermedades. El consumo diario de alimentos sanos y nutritivos, la aplicación al día de todas las vacunas, el lavado de manos a cada momento, la higiene del hogar, el aseo personal y la consulta médica frecuente, fueron algunas de las prácticas sugeridas.