El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas -CONICET-, a través de su Red de Seguridad Alimentaria a cargo de Javier Pardo, informó a la Defensoría del Pueblo de la Provincia los resultados obtenidos, en distintos puntos del río Paraguay, riachos y lagunas, trabajando sobre agua, barro, flora y peces; que fueron requeridos como consecuencia de la mortandad de diversas especies que causó preocupación en su momento.
Para tranquilidad a quienes generara incertidumbre en los consumidores hasta la fecha, y que venía perjudicando a centenares de pescadores artesanales que viven exclusivamente de la comercialización de productos de río y que son en estos días previos y durante la Semana Santa, altamente demandados, se determino que pueden ser consumidos sin inconvenientes, sugiriéndose en todos los casos, su adquisición en lugares habilitados, ya que es fundamental que no se pierda la cadena de frío y otros factores para garantizar la seguridad alimentaria.
En relación a lo peticionado por el Organismo de la Constitución, las tomas técnicas de análisis se llevaron a cabo en Riacho Boca Pilagá, Toma de agua Km 218, Riacho Boca San Hilario, Boca del Pikysyry, Fábrica Unitán y frente a la Prefectura Naval Argentina. Analizado los datos de los parámetros físico-químicos (temperatura, oxígeno disuelto, pH, conductividad, turbidez) registrados in-situ por la Prefectura Naval Argentina en los seis sitios de muestreo en la Provincia de Formosa, durante todo el mes de febrero del corriente año, más los datos de las muestras de agua colectadas en esos sitios a las que se le determinaron DBO5 (demanda biológica de oxígeno), DQO (demanda química de oxígeno), amonio, nitrito, nitrato, aspectos microbiológicos (coliformes totales y coliformes fecales), y metales totales (arsénico, cadmio, cromo, cobre, plomo, níquel, mercurio, manganeso y zinc); se observa que: los valores de oxígeno disuelto de los seis sitios de muestreo son menores (0.51 – 1.80 mg/L) a los niveles guías de protección a la biótica acuática propuestos por varios Organismos de Estudios y Protección Ambientales.
Esto sumado a las altas temperaturas registradas (30.5 -38.3 C) en los seis sitios, generan condiciones no compatibles con la presencia de vida acuática, lo que se corresponde con la mortalidad de peces observadas. Los restantes parámetros físico-químicos (pH, conductividad, turbidez) determinados “in-situ” poseen valores que se corresponden con los normales para la época del año en dicha zona. Por otra parte, el análisis microbiológico (coliformes totales y coliformes fecales), de tres muestras de agua (sitios: Riacho Boca Pilagá, Riacho Boca San Hilario, Boca del Pikysyry) evidencian valores superiores a lo recomendado, tal como expresa el informe de la Prefectura Naval Argentina, mientras que la DBO5 en cuatro de las muestras de agua, supera el nivel guía utilizado comúnmente (menor o igual a 3 mg/L). Las concentraciones de amonio, nitrito y nitrato de las muestras de agua informadas no fueron detectadas por los métodos utilizados, al igual que la presencia de algunos metales cadmio, cobre, mercurio y plomo.
Agrega el CONICET, que la mortandad de peces ocurridos en esta ocasión tuvo características particulares, como la de haber afectado a distintas especies y ocurrido de manera casi simultánea en un área geográfica muy amplia. Esto indica que se trató de un fenómeno regional, generado por la acción de factores que operan a dicha escala, como los climáticos, aunque posiblemente su efecto pudo haberse potenciado por las transformaciones ocurridas en la Cuenca. Es por ello que se sugirió que las Autoridades Competentes apliquen un protocolo común de acción ante este tipo de emergencias ambientales. En este sentido, la Red de Seguridad Alimentaria -RSA- y la Red de Fortalecimiento de la Acuicultura -ReFACUA- , expresan, que las mortandades producidas en estos casos no se relacionan ni se vinculan con el volcado de tóxicos, ya que en general estos son de efecto agudo y local, lo cual se aleja de las características de esta mortandad y de lo que indican los resultados de los estudios realizados.
Es por ello que, la frecuencia de los cambios climáticos e hidrometereológicos (crecida de los ríos, mayores lluvias) extremos previstos en esta y otras zonas para los próximos años, aumentarán considerablemente y por ello, se propone: * Elaborar un protocolo consensuado de toma de muestras, que puede ser aplicado en todas las provincias por los organismos competentes ante eventos masivos de mortandad de peces. * Organizar un curso de capacitación para personal técnico. * Diseñar, organizar y desarrollar un monitoreo sistemático en las diferentes áreas. * Organizar una base de datos de acceso público; siendo los investigadores del CONICET los que pueden colaborar en todos estas propuestas.