Ante una crecida del rio Pilcomayo, más allá de ser descomunal, experimenta características difícil de recordar otra equivalente hasta por los más baqueanos que residen en el extremo oeste, el gobierno provincial mantiene una asistencia integral a las familias afectadas y ya comenzó a diseñar el día después de mañana.
Quien así lo certifica es el ministro de Gobierno, Justicia, Seguridad y Trabajo, Jorge Abel González, señalando que “hay riadas importantes bajando de territorio salteño que están activando cañadas como La Rica y anegando campos productivos. Y esto se está dando en zonas cercanas a comunidades como El Chorro, Lote 8 y otras, lo que hizo que debiéramos atender otros frentes en esta crecida que los mismos lugareños ya entrados en años exponen no recordar, al menos en las últimas décadas, de algo similar”.
Mantenemos la asistencia integral de las familias que fueron relocalizadas transitoriamente en el centro “Solidaridad” y en otros sectores cercanos. “A cada familia se le brinda la asistencia nutricional, sanitaria, educativa y en todo lo necesario como el primer día, incluso con el correr de los días y por supuesto con la colaboración de la gente, se fue optimizando todo el modelo diseñado”, significo.
El ministro indico que “ya trabajamos en el día después de mañana, por ejemplo en evaluar si las familias deben regresar al mismo lugar donde habitaban o ser relocalizadas definitivamente en otro sitio”. Explico que “el escenario definitivamente ya no es el mismo producto de la dinámica propia generada por el rio, quien con riadas extraordinarias ingresando por secciones impensadas, hace que todo deba ser re analizado meticulosamente y así brindar la mayor seguridad a las familias de muchas comunidades”.
“El gobierno a pleno, de acuerdo a las directivas emanadas por el señor gobernador (Gildo) Insran, se mantiene trabajando en los departamentos Ramón Lista y Bermejo. Incluso tenemos un pico importante ingresando a nuestro territorio, con lo cual el alerta y monitoreo a las zonas más sensibles es una constante que no se detiene”, revelo.
Nuevo escenario, nuevos desafios
Por su parte, el coordinador del Poder Ejecutivo, Aldo Ingolotti, coincidió con el doctor González en que “se modifico el escenario a partir de esta crecida”, exponiendo que “cauces secos hace décadas han sido reactivados por grandes volúmenes de agua que bajan, sumado a una región modificada a partir de todo un proceso de transformación, con nuevas rutas y muchísimas infraestructuras sociales incorporadas, exige nuevos desafíos”.
“El agua baja a raudales por el monte, bajos que se han colmatado afectando zonas productivas. Hay una masa de agua en caída libre que se desplaza hacia la franja de Pozo de Maza, tenemos rutas actuando como tapones que nos obliga a intervenir para conducir las riadas a zonas no habitadas”, advirtió.
Incluso explico que “el canal de La Mocha se está profundizando y escurren riadas cristalinas, actuando como canal natural del rio, con lo cual es otro distintivo que estamos evaluando la mejor opción para los trabajos futuros”.
Expuso que “el río cambió el curso de recorrido por la cantidad de sedimento acumulado y derivó hacia la zona de El Churcal, El Algodón, Madrugada”, dijo, al tiempo de señalar que “vemos un cambio de cauce y el taponamiento en un sector muy angosto colmatado que fue la que provocó una deriva; sobrepasando las defensas”.
Admitió que charlando con caciques y criollos ya entrados años “no recordamos una crecida de estas características, indicativo de la necesidad de nuevas recetas”.
De todos modos se mostro optimista a partir de que “tenemos un estado presente en todo sentido, tanto en asistir integralmente a las familias como trabajar a diario para mitigar los efectos de tamaña catástrofe natural”. Explico que “disponemos de 120 kilómetros de canales activos hasta Pescado Negro y se ejecuto una evacuación ordenada con un mínimo impacto social, algo que solo puede darse con planificación, de otra manera el escenario hubiera sido extremadamente crítico”