«Me genera mucha angustia porque es una negación hacia sectores como los nuestros», indicó el profesor universitario wichí Emilio Fernández sobre los dichos de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, quien había manifestado que «sabemos que nadie que nace en la pobreza en la Argentina hoy llega a la Universidad”.
El enunciado generó todo tipo de críticas por parte de referentes e instituciones vinculados a la Universidad pública. Datos brindados por el sitio Chequeado, el equipo de Prensa de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, inclusive el INDEC, a través de la Encuesta Permanente de Hogares, entre otros, desmintieron a la Gobernadora.
Desde Formosa, el ejemplo de Fernández, el joven aborigen wichi que egresó en 2013 como profesor de matemáticas de la Universidad Nacional de Formosa (UNaF), también refuta lo expresado por Vidal.
«Me genera mucha angustia porque es una negación hacia sectores como los nuestros. No es así, porque cuando se le da la posibilidad a una persona de ir a la Universidad puede desarrollarse y crecer, ya que el hecho de aspirar a una formación, querer mejorar y aspirar a una formación superior es inmenso», afirmó Fernández.
Comentó que «actualmente doy clases en la Universidad Nacional de Formosa (UNaF), en la Facultad de Humanidades, específicamente en la materia Análisis Matemático IV del cuarto año del Profesorado en Matemáticas», agregando que se encuentra cursando el último año de la Licenciatura en Matemáticas.
«La esperanza de nuestras comunidades, nuestros abuelos y padres hacia los hijos es que hay que estudiar y formarse. La capacitación es un camino que va a llevar a los jóvenes a crecer y a integrarse a otros ámbitos de la vida. Nos permite abrirnos, entender otras cosas y adecuarnos a este mundo social cada vez más exigente», hizo notar el joven oriundo de la comunidad de Lote 8, a poco más de 600 kilómetros al oeste de la ciudad capital de Formosa, en el límite con Salta.
«Al escuchar y ver estas cosas está clarísimo el sentido político y económico», advirtió, considerando que «es negar la historia y experiencias como la mía y de mis compañeros que se recibieron de la UNaF. Es totalmente indignante».
Por último, significó que «yo no niego mi identidad, de dónde vengo. Eso es lo que me identifica y es lo que hace que me sienta seguro. Entonces escuchar estas cosas de gente que tiene otra intención y otra mirada no favorece a los pobres o a los sectores como los nuestros».