El licenciado en Economía, Jorge De Vido, expuso su opinión en tono preocupante acerca de la realidad económica del país, sobre todo advirtiendo que la inflación no se desacelera y los aumentos de precios se mantienen, sobre todo en los productos de la canasta básica.
“Hay dos datos que quiero marcar que son altamente preocupantes con respecto a los últimos datos que dio el Indec, la inflación de junio fue del 3,7%, la más alta en los últimos 25 meses. Otro aspecto es el aumento terrible que están teniendo los alimentos. Por medidas que tomó este Gobierno Nacional”, afirmo.
Advirtió que “los precios de los alimentos están dolarizados, entonces vemos cómo los costos de productos básicos como harina, polenta, aceite, frutas, etcétera, siguen aumentando. Sólo en estos seis primeros meses del año la harina se incrementó un 83% y los aceites, más de un 50%. Esto es muy preocupante”.
Otro “dato alarmante y dado a conocer también por el Indec, es el aumento de los precios mayoristas, que en junio fue el 6,5%, y en los primeros seis meses ya supera el 30%. Ahí vemos cómo la inflación no se va, no tiende a desacelerarse, todo lo contrario”.
Expuso acerca de las promocionadas Lebacs que son Letras del Tesoro del Banco Central. “A través del banco o un agente de bolsa, uno le da esos pesos y el Central te da un papel que dice que dentro de 25 días le va a devolver esos pesos más una tasa de interés, que hoy está fijada en 46%”.
“El Gobierno Nacional dice que uno de los culpables de la inflación es el circulante monetario, es decir, la plata que tenemos todos los argentinos dando vueltas. Como hay mucho circulante, eso se vuelca en mayor demanda o compra de dólares, lo que hace aumentar el precio de las cosas”, explico.
Expuso que “lo que intenta el Gobierno es absorber esos pesos mediante la compra de Lebacs. Para que la gente tenga estímulos a darle esos pesos, cada vez le paga una tasa más alta, que ahora es del 46%. Esa tasa famosa es una referencia para todo el mercado financiero, entonces nadie consigue, hoy por hoy, un préstamo con una tasa inferior a esa, encareciendo totalmente el préstamo que uno puede pedir para realizar una inversión”.
Asimismo, concluyo diciendo que “además de encarecer el crédito, hace inviable cualquier tipo de inversión en la economía real”.