La atractiva ceremonia de la tarde-noche de este viernes donde el gobernador Gildo Insfrán presidiera la habilitación oficial de la 36º Fiesta Nacional del Pomelo en Laguna Blanca, se valoro concurrente en que la misma se constituyo en una de las principales propuestas de entretenimiento que ofrece el norte del país en las vacaciones de invierno.
Poco antes de la apertura oficial de la fiesta, Insfran acompaño a las autoridades locales y pobladores del lugar al acto de inauguración de la pavimentación y sistema lumínico de una avenida estratégica del lugar.
Con las mejores expectativas en ser generadora de una “dinámica superlativa en lo social, económico y turístico”, se renueva esta tradicional fiesta donde el “pomelo como fruta emblemática de la zona, sirve como insignia de todo el desarrollo productivo que se exhibe en el predio, donde se exhibe justamente lo mucho y bueno que el modelo formoseño ha generado en estos años”.
Así fue explicado minutos antes de que se cortara la cinta en el acceso al imponente polideportivo “Evita” dando apertura a la fiesta que tendrá continuidad todo el fin de semana con un amplísimo e interesante programa de distracción para toda la familia.
El mandatario estuvo acompañado por el presidente provisional de la Legislatura, Armando Cabrera, el jefe comunal lugareño, Ricardo Lemos, el Jefe de Gabinete, Antonio Ferreira, el coordinador de la fiesta, el legislador provincial Carlos Insfrán, el director de Recursos Financieros del Consejo Federal de Inversiones –CFI- Ramiro Otero, ministros del PEP, legisladores nacionales, provinciales y comunales, además de intendentes de varias localidades, y por supuesto la gente de la zona, de otros puntos de la provincia, de jurisdicciones de la región NEA y el Paraguay, que le dieron un contexto populoso a la primer jornada.
Dirigentes del campo, empresarios, y productores provenientes de los nueve departamentos de la provincia, compartieron con los lagunenses y familias visitantes este acto apertura que contó con un marco imponente, sin dudas un comienzo prometedor.
“En el país no lo están pasando bien, este tipo de fiesta resulta muy difícil hacer, pero acá con esta gestión inclusiva y una decisión de ver a su pueblo feliz, hace que este gobierno provincial renueve su decisión de llevar adelante esta nueva edición”, expuso el jefe comunal lugareño.
El presidente de la Asociación de Productores de Laguna Blanca, Ramón Benítez, agradeció al gobernador y organizadores en situar a los paipperos en general a ser los protagonistas de la propuesta. Expuso que de no ser por el fuerte compromiso del gobierno formoseño hacia los pequeños productores, esta crisis por un modelo nacional excluyente, los hubiera empobrecido completamente.