La comunidad católica formoseña celebra este lunes 16 de julio, la fiesta de Nuestra Señora del Carmen, Madre y Patrona de la diócesis, por lo que se espera una demostración de fe y devoción en forma masiva en las celebraciones centrales de la fecha. Una de las particularidades del festejo de este año será la presentación de un grupo de Hermanas Clarisas, que consagraran su vida religiosa en un monasterio en nuestra ciudad
Así lo confirmo el padre Sergio Castro en el marco del activo cronograma de visitas de la imagen de la virgen en los diferentes estamentos que comprenden a la parroquia Nuestra Señora del Carmen –Iglesia Catedral-, compartiendo oraciones con los trabajadores en general, y en el caso de la sede del Poder Ejecutivo estuvo el gobernador Gildo Insfran y la intendencia, Jorge Jofre.
Destaco que la imagen histórica de la Virgen del Carmen llego con el fundador de Formosa, Luis Jorge Fontana en el barco El Resguardo junto a los primeros pobladores. “O sea que acompaño a esta tierra desde sus inicios y configuro a la ciudad y toda la provincia en torno a su amor de madre protectora”, reflexiono.
Anticipó que luego de la procesión que como todos los años tiene su partida desde las 15 en la rotonda del acceso norte donde se erige una imagen de la Virgen Carmen y finaliza frente a la Iglesia Catedral, en el marco del oficio religioso central previsto para las 17, además de toda la liturgia se “hará la presentación de un grupo de hermanas Clarisas que consagraran su vida religiosa en Formosa y fundaran un monasterio en nuestra ciudad”.
Indico que estas hermanas provenientes de Mexico son “de vida contemplativa, viven en un monasterio y dedican su existencia a la oración y trabajos manuales que hacen dentro del convento”, contando que lo de clarisas viene de Santa Clara de Asís, quien junto a San Francisco fundaron la orden franciscana.
Explico el sacerdote que “si bien existen muchas congregaciones de vida activa que trabajan en los barrios y las comunidades, pero será la primera vez que la provincia albergue a esta experiencia de vida religiosa contemplativa de estas hermanas”.
Señalo que “hubo un pedio del obispo Conejero y colaboración de las autoridades hacen posible que estas hermanas aporten con su silencio y sus oraciones”.
Ya a fines del año pasado el obispo José Conejero comento las tratativas con unas monjas contemplativas, de clausura.
“La delegación de las hermanas clarisas vienen de México y la idea es levantar un monasterio de vida contemplativa, dedicadas a la oración, a la alabanza y la intersección”, contó.