El administrador del Instituto de Pensiones Sociales (IPS), Hugo Arrúa, contrasto los “beneficios que en aumento se direccionan a los jubilados y pensiones provinciales, respecto a los de carácter nacional que ven cercenados sus derechos”.
«Es un punto a resaltar lo que el gobernador Gildo Insfrán ha dispuesto en todo este tiempo, incrementar los beneficios para los adultos mayores para intentar lograr que esta franja tan importante de la sociedad puedan cobrar mejor y vivir mejor a través de los distintos programas que se vienen realizando, cuyo objetivo fundamental es mejorar la calidad de vida».
Expuso la satisfacción de que el IPS tuvo un stand en la Fiesta Nacional del Pomelo “donde presentamos algo inédito: un documental donde contamos lo que anualmente se hace desde el IPS con el objetivo de contener a los adultos mayores en este tiempo tan difícil a través de distintos programas y actividades».
Planteo Arrúa reflexionar y decir que “al conversar con integrantes de centros de jubilados que dependen de ciertos beneficios que da el Gobierno Nacional, entre ellos la obra social PAMI, están muy preocupados, a tal punto que su inquietud los está llevando a un estado de estrés e inquietud emocional por todo lo que está sucediendo a nivel nacional, donde en vez de ir sumando beneficios, se los van quitando cada vez más».
Afirmo que estos “no tienen remedios y los aumentos de precios son constantes. Nos preocupa, sobre todo cuando vemos que el Gobierno Nacional a una provincia como la nuestra prácticamente no le da ningún beneficio, nos lleva a la reflexión de entender que, más allá de la política, a nivel humano que estamos en una situación de riesgo. Esto es lamentable».
Dijo finalmente que “desde el IPS, para contrarrestar esto, más allá del pago del beneficio en tiempo y forma, es importante el aspecto nutricional que tenemos a través de las Casas de la Solidaridad y además -hasta el mes de noviembre- el desarrollo los programas que tienen que ver con la actividad física de los adultos mayores, como por ejemplo los Juegos de la Tercera Edad, y los de mini turismo, que llevan a los abuelos del interior hacia la ciudad capital para que la recreación sea un complemento de este beneficio de esparcimiento y calidad de vida».