El ministro de Economía, Jorge Ibáñez, expuso algunas cifras y datos para graficar con elocuencia estar asistiendo” preocupados y azorados por los constantes aumentos de precios”. A modo de ejemplo advirtió que las subas en comestibles, combustibles y las tarifas, que sostuvo “pareciera no tener techo alguno”, sumando a todo ello la reciente decisión de eliminar el Fondo Federal Solidario que es otro golpe fuerte a las arcas provinciales y municipales.
Afirmo que “en los últimos tres meses se fueron del país más de 10 mil millones de dólares de las reservas de los argentinos del Banco Central”, aludiendo a las tasas a altísimos niveles y un dólar que trepo a casi $30 por unidad.
Opino que “las altas tasas impuestas por el Banco Central conspiran contra cualquier intento de inversión productiva”, exponiendo que “las pymes industriales, agropecuarias y los productores sienten el impacto de esta política económica que favorece la especulación financiera”.
Sostuvo el ministro que “el acuerdo con el FMI, prestamista de última instancia, que a cambio de créditos impone severas condiciones al país deudor, terminan de configurar un escenario futuro donde nada indica que la situación de la producción y las pymes mejoren”.
“Saben ustedes quienes fueron los ganadores de estas jornadas de turbulencia financiera de fines de abril y continuo en mayo en nuestro país?”, interrogo, respondiendo: “Los bancos, que ganaron según el Banco Central, ganaron $14.550 millones, un 40% más que el mes anterior y una mejora interanual del 76.1%”. Dijo preguntarse si “esto ganaron los bancos cuanto habrán ganado los fondos buitres extranjeros en esta timba financiera sin límite alguno”.
Ante este “oscuro panorama que plantea este modelo actual en crisis, nos preguntamos cuál es el camino a seguir por más de 850.300 productores y pymes que daban empleo al 70% de la población económicamente activa del país, cuando las decisiones en el marco de la macroeconomía no acompañan en absoluto”.