“Salvo todo lo que se viene diciendo mediáticamente, no tenemos ninguna información de carácter oficial sobre el despliegue en Formosa de efectivos del Ejército Argentino, por lo que resulta falaz decir que nos oponemos a algo que desconocemos”, afirmo el ministro de Gobierno, Justicia, Seguridad y Trabajo, Jorge Abel González.
Tras participar de la activa jornada de una de las facetas de la formación de poco más de trescientos aspirantes a agentes de la Policía en el ARA de la fuerza en jurisdicción de Bartolomé de las Casas, dijo que “es una falacia lo que afirman algunos medios nacionales de que el gobierno provincial se resiste a la disposición nacional de desplegar al Ejercito en nuestro territorio”.
“Oficialmente nadie nos informo sobre esto que tanto se habla mediáticamente pero sin mayores precisiones. Insisto, es ridículo oponerse a lo que uno desconoce”, expuso.
Incluso comento que estimaba que de la reunión mantenida –luego de la audiencia concedida- con el Jefe de la Brigada de Monte 3, el coronel Enrique Pando, pudiera tener mayores precisiones, aunque no ocurrio. “Es que ni ellos tienen datos precisos sobre el operativo de lanzamiento y características del despliegue a realizarse”, expuso.
De todos modos ratifico la posición firme del gobierno provincial, que dijo es compartida por miembros del Ejército Argentino en relaciónde que “no existe una preparación específica por parte de los miembros de las fuerzas armadas para desarrollar tareas en lo que hace a la seguridad porque tenemos que tener en cuenta que es muy diferente la labor de un policía a la de un soldado”.
Expuso que “un efectivo policial es adiestrado profesionalmente en su etapa de instrucción, formativa, para la prevención del delito y en el caso de que el transgresión se produzca, para reducir al autor del delito y someterlo a la justicia. En contraste, un soldado se forma para defender la autoridad territorial y la soberanía nacional por lo tanto toda su vida profesional se prepara técnicamente para eliminar esa amenaza a la integridad y soberanía nacional”.
El efectivo del Ejercito “tiene en frente tiene un enemigo, mientras que el policía a un ciudadano que delinque y tiene que reducir para someterlo a la justicia. Son concepciones muy distintas por eso alertamos esta situación”.
Refirió el ministro a “tenemos referencias muy tristes de la participación de las fuerzas armadas en seguridad interna. Apelo a analizar la historia y fundamentalmente a la incompatibilidad de preparación en lo que hace a una tarea de defensa nacional, de soberanía y defensa territorial con las tareas propias de una seguridad ciudadana que deben ser siempre democrática y defensora de los derechos humanos”, afirmo.