Asumiendo los nuevos desafíos de estos “tiempos difíciles”, que se avizora se “agudizaran a partir de políticas nacionales alejadas del sentir del pueblo”, la Policía de la Provincia celebro su 58 aniversario en el marco de un acto presidido por el gobernador Gildo Insfrán.
Fue este sábado en horas de la mañana en Fontana y avenida 25 de Mayo, donde junto al intendente Jorge Jofre, el presidente provisional de la Legislatura, Armando Cabrera, el Jefe de Gabinete, Antonio Ferreira, se realizo la tradicional ceremonia.
El jefe policial Walter Arroyo recibió a jefes policiales de provincias vecinas (Chaco, Corrientes y Misiones) y delegaciones de cadetes de esas jurisdicciones.
El capellán policial, el subcomisario fray Salvador Miguel Gurrieri oficio una invocación religiosa, y luego evocando a todos los policías fallecidos, rememorando a los más recientes, se los homenajeo con el emotivo “presente” de camaradas ante el llamamiento que le hiciera el locutor.
El comando superior policial entrego un reconocimiento al gobernador por el permanente acompañamiento a la labor de la institución, y el acto tuvo su cierre con un pasaje de desfile luego de los mensajes alusivos a la fecha del jefe policía, comisario general Walter Arroyo y del ministerio de Gobierno, Justicia, Seguridad y Trabajo.
El subsecretario de Lucha contra el Narcocrimen, Juan Bernabe Escobar, dio lectura al mensaje del ministerio de Gobierno Justicia Seguridad y Trabajo.
Se destaco el “tesón de los formoseños y el proyecto político que nos propusiera el doctor Gildo Insfrán, como aspectos medulares de esta verdadera revolución en paz que significa el modelo formoseño, el que nos ha brindado a la par de la equidad territorial la comprensión y despliegue de todo nuestro potencial”.
Dijo que “la policía es participe activo de este proceso histórico y lo demuestra con su vocación de servir al otro, asumiendo la dimensión y generosidad del proyecto provincial”.
Pondero que “jamás en la historia provincial se invirtieron tantos recursos orientados a brindarnos una línea de vida por debajo de la cual ninguno de encuentre. Eso es trabajar para que cada formoseño viva seguro, porque la seguridad ciudadana no es un mero acto policial, sino que es la política con justicia social la garante de la paz social”.
Considero que “con ello no solo le quitamos un peso a la policía, sino que le otorgamos verdadera dimensión y trascendencia a la tarea que realiza en la construcción de la seguridad ciudadana, con la participación comunitaria que es fundamental”.
Otra faceta significada fue la decisión del gobierno en “provee los recursos materiales y dotar de un parque automotor que no tiene parangón en la historia, lo mismo que en armamentos, uniformes, logística de comunicación y tecnología aplicada a la prevención e investigación del delito”, destacando la “permanente capacitación de los cuadros policiales y su compromiso para poder estar a la altura de la hora”.
Expuso que “el desafió es alto, debemos tomar conciencia de los tiempos difíciles que vivimos y se avizora que ello se agudizara. Son la consecuencia de las decisiones políticas del poder nacional, alejadas del pueblo generando pobreza y exclusión”, exhortando a que “los formoseños estemos más unidos que nunca, porque como dijo un paisano de Pialaga III, si todos ponemos un poquito, juntos vamos a ser muchos”.
Concluyo marcando su convencimiento de que la Policía Provincial “asume con plena conciencia que no hay nada más importante que el pueblo al que nos debemos y juramos proteger con nuestras vidas”.