Desde el ministerio de Desarrollo Humano recomiendan aprovechar las bondades de alimentos naturales autóctonos, por sus excelentes propiedades nutritivas y los beneficios que representan su consumo para la salud.
Muy características son por ejemplo las frutas de mango y guayaba, las cuales por estos días pueden encontrarse en grandes cantidades en distintos lugares de la ciudad y también en otros puntos de nuestra provincia.
Según señalan los especialistas en nutrición, ambas, además de hacernos disfrutar de sus atractivos colores y exquisitos sabores, aportan al organismo una amplia cantidad de nutrientes. Entre sus componentes se destacan la riqueza de vitaminas, minerales y fibras, por lo tanto están recomendadas para el consumo de personas de todas las edades.
Cabe resaltarse que concentran vitaminas como la A, B, C y E, las cuales revelan cualidades “antioxidantes, es decir que retrasan el envejecimiento; reducen factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares, degenerativas y ciertos tipos de cánceres; disminuyen los niveles de colesterol; contribuyen a la formación de glóbulos rojos y al crecimiento de los huesos y dientes, ayudan a absorber el hierro de los alimentos y refuerzan el sistema inmunológico frente a las alergias e infecciones”.
Tanto el mango como la guayaba tienen asimismo un contenido calórico que se considera “de bajo a moderado”, con cantidades bajas de carbohidratos y proteínas. Pero con alto contenido en fibras que favorece a las personas con estreñimiento, presión arterial y niveles de glucosa elevada, y problemas de sobrepeso.
“Si comemos por ejemplo un mango que pese aproximadamente 200 Gs ya nos aporta toda la cantidad requerida a diario de vitamina C para una persona adulta. Además esta porción cubre el 30% de vitamina A y más del 20 % de vitamina E. Y en el caso de la guayaba, una de sus mayores propiedades es que está compuesta por una gran cantidad de agua”, explican.