Además de ratificar su criterio que el futuro de los formoseños requiere de más justicia social y que el primer paso para cimentarla es el acceso irrestricto, igualitario y gratuito a la educación, el gobernador Gildo Insfran la reconoce como un derecho de todos y una obligación del estado que no puede ser renunciada bajo ninguna excusa.
Acerca del compromiso de su gobierno con la inclusión educativa, menciono a la modalidad rural así como también otros logros alcanzados como la erradicación de las escuelas rancho con edificios modernos; la ampliación de la planta docente y su capacitación en técnicas pedagógicas.
En cuanto a lo que se reconoce como el interior profundo, señalo que se avanzó desde los ciclos básicos rurales hacia la nueva Escuela Secundaria Agraria Formoseña con curriculas que valorizan la cultura y el entorno que la rodea.
“Dejamos atrás así un pasado donde la única posibilidad de seguir estudiando era el desarraigo que generaba perjuicio a los jóvenes, sobre todo a las mujeres”, resalto para significar que actualmente todos los niños de Formosa, vivan donde vivan, tienen una escuela donde estudiar.
En lo que forma parte de sus realizaciones más importantes para cumplir con esa política el mandatario revelo que durante su gestión se construyeron hasta ahora 1338 edificios escolares a los que califica como “monumentos a la equidad” para acotar que están en plena ejecución otros 141 que cuentan con distintos estados de avance.
Insfran sintetizo los réditos de esa política con la siguiente expresión: “Donde había abandono hoy hay una escuela llena de niños aprendiendo; donde había exclusión sembramos inclusión y donde había desigualdad construimos justicia social”.