Uno de los tramos del mensaje gubernamental en la Legislatura, cuando discurría acerca de las críticas al gobierno nacional de Cambiemos, se refirió a lo que Gildo Insfrán denomina la existencia de un fracaso ético y político.
Es que considera que cuando no se cumple con la palabra empeñada se rompe el compromiso ético de la política con la verdad, dañándose la confianza ciudadana que sustenta el sistema democrático.
Entiende que ninguna de las decisiones que llevaron a esta difícil situación por la que atraviesa el país se habían expuesto durante la campaña presidencial, recordando que hubo promesas que no habría devaluación, que no se perdería nada de lo conquistado, que no habría tarifazos, que se uniría a todos los argentinos y que habría pobreza cero «entre otros inventos del marketing electoral».
«El pueblo nunca se equivoca» insiste Insfran aunque a renglón seguido aclarar:»Pero la estafa a su confianza resulta evidente».
El gobernador estima que para algunos puede ser valido mentir en tiempos electorales aunque no sirve para gobernar ya que los resultados desnudan cualquier relato, las promesas se van llenado de excusas y solamente queda la única verdad que es la realidad, en este caso una profunda crisis donde cada argentino puede dar testimonio de lo mucho que perdió en estos años.
Sobre los desafíos más importantes para llevar adelante, según el gobernador, es la recuperación de la Patria y la verdadera democracia «que es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés, el del pueblo».