Con el propósito de garantizar la seguridad alimentaria de los sectores más sensibles, especialmente de niños, ancianos y embarazadas en situación de vulnerabilidad, el gobierno local lanzo hace cinco meses el Plan Provincial Alimentario Nutrir ofreciendo una canasta variada y balanceada de alimentos frescos, nutritivos y saludables.
El aporte estatal además se complementa con otras acciones para su abordaje integral. La empresa estatal Nutrifor articula con paipperos frutihortícolas para transformar 186 mil kilos de materia prima en 16 tipos diferentes de alimentos, que son distribuidos en el sistema educativo y de salud, además del aporte al programa Nutrir. Al plan Nutrir aporta por ejemplo las botellas de tomate triturado y mermeladas de frutos formoseños, como el mango, mamon y zapallo.
A esta gama de productos se le sumo hace poco el número 17, que es el mate cocido con leche soluble. “Este producto contiene la tradicional infusión con azúcar y solo resta agregarle agua y batir para tomarlo, ya está listo a producirse luego de superar todos los controles bromatológicos y obtener el Registro Nacional de Producto Alimenticio”, fue subrayado.
Otra de las novedades es el desarrollo de una leche fortificada con hierro y vitaminas, saborizada con dulce de leche, una nueva opción para la nutrición de los chicos. “Es parte del programa “Escuela” donde se aporta productos a medio centenar de establecimientos educativos de la ciudad y el interior, y ampliando las opciones en gustos estamos sumando esta leche fortificada sabor a dulce de leche, y en el caso de detectarse niños con signos de una mal nutrición se les aporta al hogar”, se significo.
Con el horizonte inicial de asegurar el alimento a 15 mil familias en esta ciudad a través del programa Nutrir, una de las patas que sustenta esta estrategias es la planta procesadora de alimentos Nutrifor SA, que como se señalo antes hace su aporte.
Justamente se expuso que “la materia prima que abastece a este plan es producida por los mismos pequeños productores que el estado asistía dos décadas atrás con una caja alimentaria cuando se lanzara el Paippa. Hoy son los paipperos quienes ponen su producción en la mesa de la familia formoseña.