Familias inundadas de Banco Payaguá producto del avance de las aguas del río Paraguay, recibieron al equipo de salud del hospital de Mansilla que brindó una completa asistencia para atender las necesidades sanitarias y acompañarlas en esta difícil situación.
Las abundantes precipitaciones acaecidas en los últimos días en esta zona de la provincia, se sumaron a la crecida de la masa hídrica que bordea esta colonia rural, situación que viene sucediendo desde hace unos meses. Ambos sucesos causaron recientemente que el agua llegue hasta las viviendas.
Frente a esta situación adversa, el gobierno de la provincia de Formosa, a través del ministerio de Desarrollo Humano y el cercano nosocomio de la localidad de Mansilla, dispone un amplio operativo sanitario para vigilar de cerca la salud de los vecinos ofreciendo atenciones multidisciplinarias, controles varios, instancias de vacunación y una fuerte promoción de hábitos saludables con medidas para evitar enfermedades asociadas al contexto de emergencia hídrica.
Con el traslado hasta el lugar de médicos, enfermeros, vacunadores y otros profesionales, en una intensiva jornada de trabajo, niños y adultos damnificados, recibieron “el control de signos vitales con medición de temperatura, tensión arterial, latidos y frecuencia cardíaca”.
También se realizó el estricto seguimiento a los pacientes de riesgo y que poseen diagnóstico de enfermedades crónicas. En tanto que las embarazadas fueron destinatarias de controles obstétricos “para asegurarnos que tanto ellas como sus bebés están controlados y sin complicaciones”.
Desde el servicio de vacunación fueron chequeados los carnets de vacunación y completados los esquemas de cada vacuna con la aplicación de la dosis establecidas por el calendario vigente.
En este marco, los vacunadores remarcaron la aplicación de las tres vacunas de la Campaña de Invierno: antigripal, triple bacteriana acelular y antineumocócica, indicadas para los grupos de riesgo determinados con el propósito de prevenir la gripe y otras enfermedades respiratorias: neumonía, tos convulsa, bronquiolitis, por ejemplo.
A su vez, se fomentaron múltiples medidas para cuidar la salud. Entre estas, se recomendó a los vecinos: lavarse frecuentemente las manos con agua limpia y jabón, consumir agua segura (potable o potabilizada), lavar y cocinar bien los alimentos, evitar comer alimentos crudos, evitar las picaduras de mosquitos a través del uso de repelentes, no exponerse a heridas y lastimaduras, prevenir el contacto con insectos, arácnidos, reptiles y otras especies que pueden provocar lesiones severas.