El economista Julio Svartz criticó que el Gobierno Nacional comenzara a usar plata del Fondo de Garantía de la Sustentabilidad (FGS) para equilibrar las cuentas públicas y cumplir con las metas fiscales prometidas al Fondo Monetario Internacional (FMI).
En la víspera se conoció que el ministerio de Hacienda, cuyo titular es Nicolás Dujovne, sacó $20 mil millones del FGS para lograr superávit en el primer semestre y planea usar otros $60 mil millones. También se vendieron dos centrales eléctricas para que cerraran las cuentas.
De esa manera pudo presentar su balance del primer semestre con un saldo primario favorable de $30.221 millones, equivalentes al 0,1% del PBI. El resultado supera el piso de $20 mil millones pactados con el organismo para la primera mitad del año.
“El Gobierno Nacional tiene un Fondo que en realidad tiene otro objetivo, que tiene que ver con las jubilaciones actuales y las futuras. Ese FGS se creó con el propósito de generar rendimientos para la ANSeS. Hoy, ese fondo se está utilizando para cubrir un déficit primario, que es solamente el de gastos, menos ingresos, donde el ministro Dujovne ya utilizó $20 mil millones para poder llegar a las metas que le pide el FMI”, amonestó Svartz.
En ese sentido, denunció que “eso tiene toda una trampa porque están desfinanciando a la ANSeS, es decir, las jubilaciones actuales y las futuras”, marcando que el Fondo de Garantía de la Sustentabilidad “siempre generó rendimiento porque no hay que olvidarse que tuvo las acciones de las AFJP, las cuales tenían invertidas las mismas en empresas, como en su momento fue el Grupo Clarín”.
“El objetivo del FGS siempre fue generar un mayor rendimiento para las futuras jubilaciones, cuando hoy no sólo que está perdiendo porque la economía argentina está en un proceso recesivo, sino que se están extrayendo los intereses que generaba el fondo y además capital, eso es lo preocupante”, alertó.
El economista Svartz hizo notar que “están desfinanciando el Fondo y se lo va a seguir utilizando hasta fin de año”, marcando que “lo otro preocupante es el mensaje que envía Dujovne hacia afuera queriendo demostrar como que hay un superávit primario, cuando en realidad hay un déficit financiero”.