Un equipo de salud del hospital El Potrillo, localidad del oeste, situada a unos 550 km de la capital de la provincia, brindó una charla a la comunidad destinada a promover el lavado de manos como medida fundamental para “prevenir muchas enfermedades, como por ejemplo las diarreicas y respiratorias entre otras”, explicaron desde la dirección del nosocomio.
Al respecto recordaron a las madres y a la familia en general la importancia del lavado de manos frecuente “varias veces al día, sobre todo antes de comer y luego de ir al baño” ya que es una de las maneras más efectivas, sencilla y económica de prevenir enfermedades.
En este marco, explicaron detalladamente con demostraciones prácticas: en qué consiste el lavado de manos, cómo debe hacerse correctamente, con qué elementos, cuándo y cuántas veces al día.
Así expusieron que el lavado de manos consiste frotar una mano con otra previamente enjabonadas durante al menos 20 segundos. “La forma correcta es frotar entrelazando los dedos, frotando cada palma con el dorso de la otra mano, y frotando también la punta de todos los dedos y la muñecas”, describieron. Luego se debe proceder a enjuagarlas hasta que el agua se aclare.
Este procedimiento garantiza “la eliminación de suciedad, de materia orgánica y de gérmenes que evita la transmisión microorganismos, ya que muchas veces varias personas por ejemplo tocan el mismo objeto transmitiendo los agentes infecciosos”, revelaron. Al respecto mencionaron que todos los jabones “son efectivos si se usan adecuadamente”
Lavarse las manos es un hábito de higiene indispensable, tanto para los niños como para los adultos. Desde que son muy pequeños “debemos enseñarles a nuestros hijos la importancia de lavarse bien las manos como una rutina que debe repetirse con frecuencia varias veces al día”, insistieron.
En especial “los niños tocan todo: el piso, las paredes, otras superficies que pueden estar sucias, las mascotas, papeles y otros objetos. Luego se llevan la mano a la boca y así se pueden transmitir una gran cantidad de virus y bacterias que causan enfermedades leves y graves. Por eso es imprescindible que aprendan e incorporen el hábito de lavarse las manos”.
Finalmente recordaron que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) sólo con lavarse las manos con agua y jabón antes de comer o después de ir al baño, “se podrían reducir a la mitad las muertes de niños por diarrea”. Además esta práctica ayuda a reducir la incidencia de infecciones respiratorias como la neumonía.