Hace 30 años, los dirigentes mundiales asumieron un compromiso histórico con la infancia del mundo al aprobar la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. Además, es el tratado de derechos humanos más ampliamente ratificado de la historia con 196 países.
Se realiza la invitación a la comunidad en general a que se sumen a la actividad para el día 22 de noviembre en la Plaza San Martín a partir de las 18:30 horas, a la jornada de sensibilización y concientización porque el 20 de noviembre se conmemora la Convención Internacional de los Derechos del Niño.
Al respecto, Graciela Rossi, dijo: “No quisimos dejar pasar esta fecha tan importante a nivel mundial, y desde la Línea de trabajo de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes del SeTIC, decidimos hacer una serie de actividades a través de lo lúdico y lo artístico, para que los adultos tomemos conciencia de la importancia que tiene la defensa de los derechos de los niños”.
Además, agregó: “Los derechos siempre nacen a partir de una necesidad, pero está en nosotros como adultos y como ciudadanos poder garantizar que estos derechos realmente se lleven a la práctica, se efectúen y se respeten”.
El objetivo de la actividad es crear conciencia de la importancia que tenemos como adultos de que niños, niñas y adolescentes crezcan de una manera sana, respetando su derecho a la educación, a la salud, a la recreación, son titulares de estos derechos humanos y deben recibir empoderamiento para ejercerlos.
Hace 30 años, la Convención reconoció que los niños tienen identidad propia y que deben ser titulares de derechos no negociables. Casi todos los gobiernos se han comprometido a respetar, proteger y promover esos derechos. Esto convierte a la Convención en uno de los pactos de derechos humanos más visionarios y universalmente aceptados de la historia.
Este aniversario es una buena ocasión para que la comunidad redoble sus esfuerzos encaminados a que los niños se desarrollen y para que renueve su compromiso de proteger y promover todos sus derechos humanos.
En este sentido Formosa, es impulsora de propiciar el acceso equitativo a los servicios esenciales y participación de manera significativa en las decisiones que les conciernen.