El Programa Provincial Comedores Escolares y Copa de Leche, vuelve a recibir ayuda de parte del Gobierno Provincial, a través de la gestión del Ministerio de Cultura y Educación, para que las instituciones del sistema educativo, puedan garantizar a sus estudiantes el suministro de prestaciones alimentarias. Se trata de la entrega y distribución de productos alimenticios.“El Ministerio tiene un convenio con la Planta Nutrifor, donde adquiere, mensualmente, productos para reforzar la asistencia que hoy en día los niños reciben en sus escuelas. Estos son: mate cocido con leche, chocolatada, polenta enriquecida con leche, mermeladas, puré de tomates y guisos de lentejas con arroz”, manifestó la Lic. Rosalba Almirón, Responsable del Programa.
En este momento, por la capacidad productiva y logística de la planta, se distribuyen a 95 escuelas de la provincia. “Desde el Ministerio se está gestionando para llegar a la mayor cantidad de instituciones. Esta semana arrancamos con nuestra primera entrega en la Delegación Zonal de Río Muerto. Ya tenemos la mercadería para la segunda”, culminó Almirón.
Como parte de la política social territorial que lleva adelante la gestión gubernamental de Formosa, todos los años (incluyendo los recesos de verano e invierno) instituciones de la provincia, pertenecientes a los niveles Inicial, Primario y Secundario, incluyendo las modalidades Urbanas y Rurales, han sido beneficiarias por el Programa. En agosto del presente ciclo lectivo, el Gobierno provincial ha tomado la primera medida de ayuda para paliar la actual crisis económica que atraviesa el país, otorgando el 40 % de aumento en el presupuesto mensual.
La buena alimentación, es un factor estratégico fundamental para el desarrollo integral del ser humano en sus diferentes etapas de la vida, debido a que incide de manera determinante en el normal desarrollo físico y cognitivo, incidiendo en el aprendizaje de las personas. Por ello, este año, el Ministerio ha tomado al ciclo lectivo como “El año pedagógico de la Alimentación Saludable” y el Estado ha tomado la responsabilidad de garantizarles una sana nutrición en contribución a la que reciben en sus hogares.