Se concretó el embarque hacia el Mercado Central de Buenos Aires de más de 1000 cajas de cartón y madera conteniendo mangos de los pequeños productores de la región nordeste de la provincia desde las únicas dos plantas de empaque autorizadas por SENASA en Formosa. Se trata de las instaladas en Ceibo 13 y Misión Tacaaglé, ambas unidades pertenecientes al (Centro de Validación y Tecnología Agropecuaria), Cedeva.
El coordinador general del Cedeva, ingeniero Jorge Balonga, explicó que se trabajó junto al Senasa para la aprobación de los dos empaques: Ceibo 13 y Misión Tacaaglé – dedicados a las frutas no cítricas de la zona-, ya que las nuevas normativas indican que todos los empaques que salgan de la provincia tienen que ser autorizados por el Senasa, indicó, dando a conocer que el empaque de mangos formoseños tiene como destino la provincia de Jujuy.
Este gran logro para la producción local, dijo el ingeniero Balonga fue posible conjuntamente con los pequeños productores y “el Cedeva que realiza el control de calidad del azúcar que debe tener como base para que se puedan comercializar bien, y de allí al Mercado Central”. Además, detalló que los mangos que envían los productores “son mangos injertados de plantaciones que ya había en la zona, con plantaciones nuevas” y que “con mucho trabajo por parte del Cedeva con los productores y con los municipios como el de Laguna Naineck para rejuvenecer esas plantas y para que produzcan mejor y eso da como resultado tener una buena cosecha de mango con el tiempo y que son mangos con diferentes variedades que requiere el mercado de comercialización”, puntualizó.
“Desde que iniciamos el Cedeva Tacaaglé hace diez años lo primero fue hacer un censo de la zona, para indagar qué había y cómo se venía trabajando, y de esa manera proponer un programa de mejoramiento y normativas nuevas con respecto a la cosecha”, detalló como se comenzó a trabajar con los pequeños productores de la zona de Tacaaglé, que el lunes pasado cumplieron con el empaque de mangos al Mercado Central. Recordando el ingeniero que en ese entonces el primer diagnóstico que tuvieron fue que cortaban verde los mangos y llegaban al Mercado y se pudría. “Entonces lo que ahora hace el Cedeva hace tres años es visitar a los productores, tomar muestra de los mangos, verificar el nivel de azúcar, la calidad e indicar en que momento tienen que cosechar para que esos mangos lleguen y se distribuyan bien”, finalizó.