Este 12 de marzo se conmemora el Día Mundial del Riñón, fecha que fue creada para generar conciencia entre todos los habitantes del mundo para que puedan detectar cualquier padecimiento en los riñones de forma precoz y cuando aún hay tiempo para solventar la situación o para retrasar lo inevitable.
Como todos los años, Formosa se suma a este acontecimiento mundial a través del Programa de Prevención y Control de la Enfermedad Renal Crónica y el Hospital de Alta Complejidad “Pte. Juan Domingo Perón” para brindar información y recomendaciones a los efectos de prevenir la enfermedad renal.
Los riñones son un órgano de regulación del equilibrio interno. Mediante la filtración de la sangre, eliminan las sustancias de desecho y recuperan aquellas que son necesarias.
Cumple las siguientes funciones: filtra la sangre y extrae las substancias tóxicas del organismo, a través de la orina se eliminan los elementos nocivos, así como el agua y las sales minerales en exceso; mantiene el equilibrio interno de forma constante, lo que permite el correcto funcionamiento de todas las células del cuerpo; fabrica substancias que actúan como hormonas que estimulan la producción de glóbulos rojos; regulan la presión arterial y mineralizan el esqueleto.
Enfermedades que producen una insuficiencia renal crónica
La hipertensión arterial y la diabetes son las dos causas más comunes pero también hay otros problemas de salud que afectan al funcionamiento del riñón por ejemplo: enfermedades inmunológicas; alteraciones de las arterias del riñón; infecciones; abuso de analgésicos; obstrucción de las vías urinarias o procesos hereditarios; Efectos de nacimiento (anomalías congénitas) de los riñones
La ERC empeora lentamente durante meses o años. La pérdida de la función puede ser tan lenta que usted no presentará síntomas hasta que los riñones casi hayan dejado de trabajar.
En la etapa final, los riñones ya no tienen la capacidad de eliminar suficientes desechos y el exceso de líquido del cuerpo. En ese momento, se necesitará diálisis o un trasplante de riñón.
Medidas de prevención
Controlar las causas de insuficiencia renal crónica (hipertensión arterial, diabetes, etc.).
Detectar y tratar las infecciones que afectan directamente a las vías urinarias y todas aquéllas que secundariamente pueden afectar a los riñones.
Realizar un control médico estricto en el caso de sufrir gota o cólicos nefríticos frecuentes (piedras en el riñón).
No abusar de los analgésicos y de los antiinflamatorios.
Evitar las situaciones de riesgo que pueden conducir a infecciones víricas como la hepatitis y el sida
Adoptar un estilo de vida saludable, con la práctica de ejercicio regular y una dieta equilibrada.
Aunque no lo parezca, el 10% de la población mundial sufre de alguna enfermedad renal crónica, pero no suelen darse cuenta hasta que el problema ya se encuentra bastante avanzado y los únicos caminos que les queda por transitar es la diálisis o un trasplante de riñón.
La buena noticia es que detectar cualquier mal funcionamiento en los riñones es muy sencillo, porque solo basta un simple examen de laboratorio de sangre y orina. Si los riñones están trabajando como deben, los niveles arrojados por los análisis estarán en sus patrones normales, pero si cualquiera se encuentra fuera de rango, es motivo para realizar un estudio más a fondo.
Cabe remarcar que no siempre unos valores extraños significan que hay problemas en los riñones. Se pueden deber a una simple infección de orina, problemas a nivel de la vesícula o incluso problemas de circulación sanguínea. Pero, cualquiera que sea el detonante, es mejor haberlo detectado a tiempo.