El senador nacional por Formosa, José Mayans se refirió a la situación de emergencia sanitaria que vive el país y el mundo como consecuencia de la pandemia del coronavirus. En ese sentido, aseguró que el presidente de la Nación, así como los gobernadores y los municipios tomaron medidas inmediatas para evitar la propagación del virus.
Y sobre los reciente cacerolazos en Buenos Aires, acusó a los dirigentes del PRO, de ser quienes llevaron adelante esta operación. «Las cacerolas porteñas responden a un sector de la política que es el macrismo, es tan evidente porque prácticamente permanecieron callados durante los cuatro años del gobierno de Macri», acusando de esta maniobra a Marcos Peña (ex Jefe de Gabinete) y Patricia Bullrich (ex ministra de Seguridad).
Según entiende el legislador del Frente de Todos: «La estrategias de la dirigencia del PRO empezó cuando el presidente de la Nación, Alberto Fernández, junto con los gobernadores pidieron ser solidarios en este momento de crisis, y fundamentalmente cuidar el empleo en el país».
Sin embargo, la empresa Techint despidió a casi 1500 personas, a solo catorce días de dictarse la cuarentena obligatoria en el país, por lo que obviamente el Gobierno Nacional reaccionó inmediatamente y dictó la conciliación obligatoria. Seguidamente, el empresario Nicolás Caputo, hizo lo mismo echando a 750 trabajadores, apuntando -el presidente de la bancada del FdT en la Cámara de Senadores de la Nación-que tanto Paolo Rocca como Caputo, «fueron ampliamente beneficiados en el gobierno de Macri».
Por eso, la Nación oficializó un nuevo DNU que pone freno a los despidos de trabajadores en una situación de emergencia sanitaria por el COVID-19, pero sectores de la oposición opinó Mayans, insisten con tratar de sacar «provecho» a la situación e instalan a través de los medios de comunicación monopólicos que los tres poderes del Estado: legislativo, ejecutivo y judicial deben aportar un porcentaje de sus sueldos «para distribuir en esta crisis, lo cual no soluciona absolutamente nada el problema y además se trata en términos generales de un aporte insignificante para lo que realmente se necesita».
Según indicó en el poder legislativo la última actualización de los haberes fue el año pasado, es decir, se congelo los sueldos a nivel nacional, con lo cual hubo una disminución de los gastos.
Y volvió a señalar la contradicción de los cacerolazos que llevaron adelante los porteños, por quienes dijo: «No hubo medidas de este tipo prácticamente en los cuatro años del gobierno anterior», cuando Macri «paralizó la obra pública en todo el país, y por ejemplo en Formosa las obras del Gasoducto del NEA, obras de agua potable, las rutas, las cacerolas porteñas no aparecieron», mostró la paradoja de una medida de protesta en medio de una pandemia global.
Y siguió: “Como tampoco cuando Macrinos endeudó con el FMI por 57 mil millones de dólares tampoco protestaron, o cuando quitó el Fondo Solidario Sojero a las provincias y los municipios”. Porque para el él, la respuesta es simplemente que «las cacerolas porteñas responden directamente al PRO y no a los intereses federales y nacionales». «Entonces creo que en este momento muy difícil que está pasando el país, la intención de Marcos Peña y la ex ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quienes están al frente de estas operaciones es para desprestigiar a la política y al propio presidente de la Nación», sostuvo, categórico.
Siendo sincero que es una maniobra que «no esperábamos del PRO, porque en ningún momento el presidente tildó de miserables a los pequeños comerciantes y PyMEs, sino se refirió a los grandes empresarios que llevaron adelante despidos», que el Ejecutivo nacional dio directivas al Ministerio de Trabajo para que haga un seguimiento a nivel de empleo del país, así como también desde el Ministerio de Economía anunciaron un paquete de medidas para paliar las consecuencias económicas en los pequeños comercios y monotributistas.
Por eso volvió a remarcar que «desde el poder legislativo acompañamos al presidente desde el momento que se tomó conociendo del nivel que iba tomando el contagio del coronavirus en el país. En esto tanto, el Gobierno Nacional, como los Estados provinciales y los municipales actuaron de forma inmediata dictando la emergencia y la cuarentena obligatoria para evitar la propagación del virus, y no subestimando la situación como en otros países».
Especialmente en Europa, donde por ejemplo, Francia, España e Italia, no le dieron la importancia que tiene la pandemia aún con la declaración de la Organización Mundial de la Salud a principios de marzo que hablaba sobre la propagación veloz que posee el COVID-19.
Argumentando que esos países mencionados «pensaban que iban a seguir funcionando prestando más atención a la economía, y ahora están en una situación muy grave, lo mismo le sucede a Estados Unidos, que prácticamente tiene 200 mil infectados y más de 3 mil fallecidos».
El estado y la política
Mayans dio como ejemplo el caso del gobierno de Formosa y donde el propio gobernador Gildo Insfrán recorrió en los últimos días las plantas de NUTRIFOR, FONTEX y el Laborario LAFORMED, todas instituciones que están elaborando insumos de alimentos, indumentarias y medicamentos de diferente tipo, para afrontar la pandemia del COVID 19.
«Esto es hacer y gestionar políticas públicas; a mi parece que la política como es el caso del gobierno de Formosa a través de estas plantas de elaboración de diversos productos locales trata de amortiguar las consecuencias de una crisis que es muy fuerte, y que por ejemplo en el caso de NUTRIFOR, abastece en este momento a un número importante de escuelas con lo necesario para la alimentación de los niños», refirió justamente a la institución estatal, que el senador formoseño tuvo oportunidad de visitar acompañando al Gobenador , el día martes.
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