Habían vuelto del sur del país
Un total de 60 trabajadores formoseños finalizaron este jueves con el aislamiento sanitario preventivo y obligatorio llevado adelante en la Escuela de Cadetes de la Policía de Formosa.
Se trata de una medida sanitaria que rige en el marco de la pandemia del coronavirus y que se cumple estrictamente con todas aquellas personas que regresen a la provincia.
Un grupo de funcionarios encabezados por el vicegobernador Eber Solís despidieron al contingente que partió en un colectivo hacia el interior provincial, para retornar a sus hogares.
Es el primer contingente de comprovincianos, quienes estaban trabajando en el Alto Valle, en Río Negro, y que una vez dictada la cuarentena obligatoria en el país, el pasado 20 de marzo, habían solicitado la ayuda del Estado provincial para su regreso a la provincia.
“Los felicito porque nos comentaron del ejemplo que dieron de comportamiento y responsabilidad, que han entendido la situación por la que pasa el país, supieron llevar adelante esta situación” los despidió el vicegobernador Solís.
Por su parte, el ministro de Gobierno, Jorge Abel González, explicó que “este grupo cumplió de manera absolutamente educada, entendiendo desde un principio tanto ellos como la familia de la importancia de cuidar la salud” y agregó que “están asintomáticos, fueron controlados, es hora de volver a casa contentos y seguros”.
Consultados por la prensa, los trabajadores agradecieron el trato recibido en la Escuela de Cadetes. Es el caso de Ladislao Ávila oriundo de la localidad de Riacho He Hé.
“Tenemos que agradecer a los jefes de la institución, fue una buena atención la que recibimos. Agradecemos al gobernador Gildo Insfrán, que hizo lo posible para que lleguemos desde el sur, donde está estábamos trabajando en chacras de peras, manzanas, quiero valorar el esfuerzo que hicieron para traernos desde allá, agradecemos un montón la atención que tuvimos”.
Por su parte el piranense Pablo Alarcón contó que en su caso estaba afincado en General Villegas, provincia de Buenos Aires desde octubre trabajando como parrillero.
“Yo venía a dedo y en General Mansilla me embarqué con este grupo para cumplir la cuarentena. Tuvimos un muy buen trato, pasamos la cuarentena y ahora volvemos a nuestras casas”, destacó.
El aislamiento es una medida dispuesta por el Consejo de Atención Integral de la Emergencia COVID-19 y está en vigencia para todos aquellos formoseños y formoseñas que vuelvan a Formosa en medio de la pandemia, “en resguardo de la salud de todos los formoseños”, reiteraron las autoridades; y sobre todo para mantener el status sanitario que goza la provincia de Formosa, que hasta la fecha continúa sin registrar casos de coronavirus.
El director del Hospital Central, Mario Romero Bruno, explicó que una vez pasados los 14 días de aislamiento que recomiendan la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud de la Nación, “las personas pueden volver a su vida normal”, aclarando, que el tiempo de confinamiento es porque en ese período el ser humano puede llegar a presentar síntomas compatibles con el virus del COVID-19.
Finalmente, recordar que un segundo contingente de 55 formoseños, también provenientes del sur del país continúan cumpliendo en la Escuela de Cadetes de la Policía los 14 días de aislamiento social, preventivo y obligatoria según protocolo nacional vigente ante la emergencia por la pandemia.