“Estamos orgullosos de todos estos científicos –muchos de ellos salidos de la Universidad pública- que hicieron posible este despegue. Démonos cuenta de lo importante que es que el Estado invierta en educación, en ciencia y en tecnología porque así vamos a crecer como sociedad y ser un mejor país”, dijo el presidente de la Nación, Alberto Fernández, luego del éxito de la misión.
El doctor en Física Rolando Granada, investigador de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y profesor del Instituto Balseiro, resaltó que el exitoso lanzamiento del satélite nacional Saocom 1B “significa un orgullo enorme para todos los argentinos”.
Este domingo, el satélite nacional Saocom 1B tuvo un lanzamiento exitoso y a las 20.33 ya estaba en su órbita. Lo hizo a bordo de un cohete Falcon 9 de la compañía Space X que despegó desde la base de Cabo Cañaveral ubicada en Florida, Estados Unidos.
“El satélite tiene el nombre de Saocom 1B, que es gemelo del Saocom 1A, y este acontecimiento significa un orgullo enorme para todos los argentinos, particularmente para los que de alguna manera estamos cercanos a los que trabajan en la actividad espacial, en nuestro caso en Bariloche, ya que la CNEA es también uno de los participantes y el INVAP por supuesto”, subrayó a AGENFOR el doctor Granada.
Según se explicó, el Saocom 1B “es un satélite de una complejidad muy grande, que funciona observando en base a radares. Tiene 35 metros cuadrados de antena de radar –que vendrían a ser los ojos del satélite- y para poder construirlo se requiere dominar la tecnología de radares de una manera muy precisa”, marcando que “sólo Japón tiene un satélite de semejante complejidad”.
“Es la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) la que se encarga de desarrollar todo este plan espacial argentino, fundamentalmente a proveer estos satélites con enormes capacidades con aplicaciones directas a las cuestiones productivas, ambientales, territoriales, etcétera”, acentuó.
En efecto, el proyecto de los Saocom fue pensado a partir de requerimientos hechos por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional del Agua (INA) para atender necesidades de los sectores productivos y la gestión de emergencias naturales y catástrofes. Pero, a su vez, servirá a otros Ministerios porque, a través de sus imágenes será capaz de, por ejemplo, detectar buques extranjeros que pescan de manera ilegal en la plataforma continental Argentina.
“Una de las condiciones del Saocom 1B fue la posibilidad de hacer un seguimiento muy cercano de por ejemplo el grado de humedad de la tierra, particularmente las pampas, los grandes territorios cultivables de la Argentina, con una frecuencia y una resolución muy altas”, precisó Granada, apuntando que ello permitirá a los productores “hacer una actividad mucho más precisa en el riego, el uso o no de fertilizantes y demás”.
Mencionó además que “se podrán estudiar otros aspectos que están directamente vinculados a otras cuestiones de índole social, como la movilidad en las urbes, ya que la resolución lo va a permitir, ni hablar de la defensa y la observación de nuestros mares, a los fines de que no haya pesca ilegal”.
Categórico, el especialista apreció que “este acontecimiento posiciona a nuestro país en un lugar de avanzada desde el punto de vista del diseño, la integración y la construcción de este tipo de satélites”.
“Son muy pocos los países que tienen la capacidad de desarrollar satélites que utilicen este instrumento tan especial que es el radar, de manera que estaremos en condiciones de proveer información a otros países del mundo y también desde el punto de vista tecnológico avanzar en este sentido”, recalcó, haciendo notar que “la puesta en órbita significa que se ha cumplido una enorme cantidad pasos que empujaron para adelante a la tecnología argentina, particularmente del área espacial”.
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