Dos presentan síntomas moderados y los otros dos, están graves.
El médico infectólogo, Julián Bibolini, brindó el parte de salud diario de los pacientes que permanecen internados con COVID en el Hospital Interdistrital Evita.
De los 31 diagnosticados, cuatro se encuentran en terapia intensiva, dos con síntomas moderados y dos, graves.
Los moderados están con la necesidad de aporte de oxígeno con mascarilla o sea que “todavía se mantienen estables” y sin mayores cambios con respecto a días previos.
“No tuvieron empeoramiento, eso es alentador, pero necesitan oxígeno, uno de ellos un poco más elevado que la otra persona, pero están estables y siempre con pronóstico reservado porque hay que ver cómo evolucionan en el transcurso de los días”, explicó el especialista.
Los otros dos pacientes catalogados como graves están en una “situación compleja”, por lo tanto, requieren asistencia respiratoria mecánica porque el oxígeno “no les llega lo suficiente” y se debió introducir con mayor exactitud la cantidad de oxígeno necesaria.
“Habrá que ver como evolucionan, tienen pronostico reservado porque no sabemos cómo se va a resolver el cuadro”, indicó Bibolini.
Respecto a las personas que están internadas en sala general, sólo dos manifiestan síntomas leves, pero “fáciles de controlar” con medicamentos. Algunos tienen factores de riesgo, pero también están en tratamiento.
En cuanto a los dos niños menores de 14 que continúan internados, están estables y siendo evaluados por los pediatras.
“Veremos si en un par de días tenemos la dicha de un alta, se verá a medida que los estudios den negativos”, anticipó el médico.