Pandemia por Coronavirus
El licenciado Raúl Candia Director de Prevención y Promoción del IAPA se refirió a los canales de comunicación habilitados entre el gobierno y comunidades aborígenes del oeste provincial, en la lucha conjunta contra el coronavirus. Al mismo tiempo, fustigó a ciertos dirigentes que en vez de contribuir con el diálogo, promueven el desánimo y la confrontación.
Acompañado por Néstor Dos Santos, del equipo técnico del organismo, Candia consideró que el gobierno asumió “el imperativo ético, social y político, de cuidar de la vida y la salud de los formoseños. Las decisiones políticas y las medidas sanitarias implementadas, como esfuerzo conjunto del pueblo y gobierno, procuran proteger el don más precioso: la vida”.
“Las disposiciones sanitarias han demostrado ser efectivas, sobre todo si se tiene en cuenta la realidad del contexto regional, nacional o mundial. Conservar este estatus sanitario y frenar la propagación del virus exige el mejor esfuerzo y el compromiso de todos” sostuvo.
Por ello y ante la situación sanitaria que atraviesa la provincia, y en especial en este último tiempo, las distintas comunidades y localidades del oeste formoseño, consideraron que ciertos referentes con sus mensajes y actitudes siembran división y confusión.
“Qué lejos están de su verdadera misión, que no es otra que construir la concordia, fortalecer los lazos de amistad social y animar en la esperanza a personas, familias y comunidades” opinó el funcionario.
Es por ello que reflexionó acerca de las medidas, estrategias e intervenciones sanitarias que se llevan adelante al considerar que son inclusivas y tienen como destinatarios a todos los formoseños sin ningún tipo de distinción respecto a su origen, etnia, cultura, posición económica o lugar de residencia.
“Se atiende a las distintas realidades que plantean las personas y comunidades desde el respeto por las diferencias sociales y culturales. Existen seiscientas cuarenta mil situaciones particulares de vida para atender y equilibrar con el bienestar de todos. Esta tarea no es fácil. Esto lleva a que, en la dinámica sociosanitaria, se prioricen en la planificación, las acciones que den una respuesta pronta y eficaz” puntualizó.
Subrayó Candia que hay canales de acompañamiento, diálogo y comunicación, desde ahí se entienden los encuentros entre referentes de los pueblos originarios y los del gobierno.
“En estos espacios se da un verdadero diálogo que implica la apertura y el respeto por la realidad del otro. En este diálogo se persigue la búsqueda conjunta de puntos de encuentro y la toma de decisiones. Sin embargo, existen algunos que intentan desacreditar el proceso porque no coincide con su postura o con sus propios intereses” sostuvo.
Para el licenciado, esta situación epidemiológica podrá superarse no solo con el personal y los recursos suficientes, que ya están presentes en esas comunidades para atender la emergencia, sino también con la colaboración de la población.
“Esto implica el compromiso personal y comunitario en el refuerzo de las prácticas de cuidado, el cumplimiento de las medidas preventivas y la valoración de las acciones que se vienen realizando. Se trata de una contribución que pone en valor el esfuerzo personal en pos del bien de todos” enfatizó.
Dijo que por todo esto, “resulta difícil comprender las posturas de ciertos referentes que afirman defender derechos pero que sin embargo promueven actitudes que ponen en peligro el derecho fundamental de todos como lo es la vida”.
Finalmente expresó que los momentos de dificultad ponen en evidencia el talante de los pueblos y la calidad de sus dirigentes. “Por esta razón estamos seguros que podremos superar esta coyuntura. El desafío es fortalecer la responsabilidad común desde la unidad, tal como lo expresa el Papa Francisco Ahora más que nunca, son las personas, las comunidades, los pueblos quienes deben estar en el centro, unidos para curar, cuidar, compartir”.