El legislador subrayó que el ex cacique describe una realidad distorsionada sobre la situación aborigen en Formosa.
El Presidente del Bloque de Diputados provinciales del PJ, Agustín Samaniego, se refirió a las declaraciones del dirigente Félix Díaz en un canal de aire de la televisión porteña y consideró que “superó los límites éticos y morales de lo que puede ser un debate político”.
“En realidad fabulando historias del Gobernador Insfrán y su familia, que no por disparatadas dejan de ser graves. Los guionistas que le escriben el libreto a Díaz es evidente que son impermeables y resistentes a la verdad”, sostuvo.
En ese sentido, el legislador provincial opinó que la utilización de herramientas “tan falaces y burdas” para una embestida política, sólo generan “estupor e indignación” en la sociedad formoseña.
“Por supuesto que tiene todo el derecho de disentir con el gobierno de Formosa. Pero debe saber como actor político que es, que tiene la obligación de hacer política con la verdad”, aclaró.
Y agregó: “Miente cuando dice desde Bs As, ciudad que ya es su nueva residencia, que es autoridad cacique. Aquí todos sabemos que carece en absoluto de representatividad en su comunidad, y menos en su etnia. Todos sabemos que miente cuando describe una realidad distorsionada sobre la situación aborigen en Formosa. Hasta se atreve a comentar acerca de la visión de las comunidades aborígenes frente a la Pandemia. A tantos kilómetros de distancia pretende hablar de la lucha que estamos dando todos juntos, respetando nuestra diversidad cultural y étnica, contra el Coronavirus”.
Además, el diputado resaltó que “este ataque tan rastrero” no es un hecho aislado ni una casualidad, sino que forma parte de una estratagema “que tiene como blanco a nuestra provincia, a nuestras medidas sanitarias y al Gobernador”.
“Hace unos meses está en marcha un plan anti Formosa orquestado por medios de comunicación hegemónicos nacionales, con el sector más rancio y bizarro de la oposición nacional, y como siempre los inefables colaboradores de la provincia”, observó.
Y manifestó: “Ese plan no solo es de desprestigio o de críticas a tal o cual medida. La oposición en Formosa tiene un proyecto de agresión, discordia y violencia. El vocabulario belicoso que utilizan, los métodos incitadores a la provocación que llevan adelante, y la simultaneidad indecorosa de su accionar confirman este hecho. Hasta parecería que buscan ansiosamente una víctima fatal en alguna de sus protestas. Su desesperación por la proximidad de un acto eleccionario y el fin de sus mandatos, los hace estallar en furia y odio”.
En otro orden, Samaniego esbozó que el Modelo Formoseño transformó para siempre la realidad de la provincia, “cambiando el devenir histórico de todos los formoseños”; y que esos avances en la calidad de vida, con escuelas, caminos, centros de salud y hospitales, comunicaciones digitales, viviendas, energía eléctrica y acceso al agua potable entre otras, alcanzó, “como un acto de justicia social”, a los pueblos originarios.
“Todo ello se produjo y se produce en armonía, paz y concordia con el protagonismo en su desarrollo de las tres etnias indígenas”, aseveró.
Por último, el presidente del bloque justicialista fundamentó que “estamos en un momento difícil de la historia del mundo”, por enfrentar una pandemia que “no detiene su marcha”; y que “Formosa lucha decididamente para mitigar su daño”.
“En esa gigantesca tarea estamos la inmensa mayoría de los formoseños y formoseñas. Dirigentes políticos opositores contumaces eligieron otro camino. El de la violencia y la disputa permanente. Hacemos un llamado nuevamente a la cordura, responsabilidad y sensatez, más aún en estos momentos. Si no sepan también que inexorablemente se encontraran con un pueblo unido, solidario y organizado que no arriara sus banderas, ni renunciará a sus convicciones”, concluyó.