Por medio de las brigadas sanitarias que recorren las casas, charlan con los vecinos y enseñan los cuidados principales que deben cumplirse para prevenir la enfermedad
Los operadores sanitarios del Ministerio de Desarrollo Humano que trabajan de manera simultánea en distintas localidades del territorio provincial, articulando tareas con los Municipios locales, continúan fortaleciendo las labores preventivas vinculadas a la prevención del dengue.
De manera especial, insisten en el “control focal” mediante el uso del larvicida y la eliminación de los criaderos de mosquitos, medidas claves que se suman al uso del repelente, el descacharrizado y las fumigaciones, tanto domiciliarias como espaciales –en lugares públicos-.
Desde el Departamento de Control de Vectores y Zoonosis del Ministerio de Desarrollo Humano informaron que en estos días, se acentuaron dichas acciones en las localidades de Pozo del Tigre, Laguna Yema, San Martín Dos y en la ciudad capital.
En cada uno de los puntos mencionados, se demostraron especialmente a las familias las técnicas que deben aplicarse para el control de focos. “En primer lugar los brigadistas proceden a la detección de los criaderos de mosquitos (focos), luego se hace la correspondiente neutralización y, al mismo tiempo, se enseña la forma correcta de eliminación o la aplicación adecuada del larvicida, según el uso de cada recipiente”, explicó el responsable del Departamento de Vectores y Zoonosis, veterinario Alejandro Romero.
Cabe destacarse que el larvicida Bacivec se entrega gratuitamente a los vecinos. Está destinado a matar las larvas de los mosquitos que puedan estar alojadas en los recipientes que no pueden eliminarse porque se utilizan para juntar agua. Por ejemplo: aljibes, cisternas, tanques, cántaros y similares”, mencionaron los responsables a cargo de las brigadas.
Por otra parte, con demostraciones prácticas, indicaron cuáles son los objetos a los que debe prestarse mayor atención y cómo eliminarlos o tratarlos adecuadamente para evitar que los mosquitos pongan allí sus huevos. “La tarea principal es educar a las familias para que sepan cómo seguir las recomendaciones al pie de la letra para contribuir a la prevención. Y concientizar sobre la importancia que tiene evitar que se reproduzcan los mosquitos para evitar así la enfermedad”, consideró.
En ese sentido, en cada visita, los técnicos dejaron como mensaje que diariamente hay que revisar cada lugar de las casas y prestar atención a los objetos, sobre todo los que están tirados.
“Los que no se usan deben desecharse en bolsas cerradas o enterrarlos. Y los que se utilizan a diario, deben ser tapados o colocar en ellos el larvicida en la forma señalada. O desagotarlos, fregar las paredes y cambiar el agua, como por ejemplo los bebederos de animales, los desagotes de acondicionadores de aire”, especificaron.