Debido al avance del Río Pilcomayo, el 16 de febrero del año 2018, las
comunidades aborígenes del oeste formoseño de El Churcal, Pozo Ramón, La
Madrugada, La Rinconada y Tres Yuchanes sufrieron una importante
inundación que trajo como consecuencias las pérdidas de sus edificios
escolares, algunos recién inaugurados, como así también la de sus hogares.
La directora de la E.P.E.P. N° 389 de El Churcal, Sandra Cortez recordó que,
en septiembre del 2017, el Gobernador inauguró una “hermosa escuela” con
todas las comodidades y espacios para los niños donde “no tuvimos ni tres
meses trabajando en ella” porque en febrero de 2018, llegó la inundación del
Río Pilcomayo y arrasó con toda la comunidad, las casas, la escuela, “lo
perdimos todo”.
“La escuela contaba con los mobiliarios, computadoras, no nos dio tiempo a
nada, el agua se llevó una hermosa escuela con todas las cosas. Gracias a Dios
no hubo pérdidas de personas, de niños, en un lugar tan inhóspito, en el último
rinconcito del suelo formoseño teníamos un modelo de escuela”, lamentó.
Por su parte, el director de la E.P.E.P. N° 485 del Paraje Pozo Ramón, Juan
Ismael Estigarribia, narró que, en el año 2012, recibieron la visita del primer
mandatario provincial, Gildo Insfrán con motivo de la inauguración del
establecimiento.
“Una infraestructura de la que no tenemos nada que envidiar a escuelas de
otras provincias porque teníamos agua, una enorme cisterna, con un motor
para poder elevar el agua, baños instalados para personas con discapacidad,
cocina, comedor, aulas para los niveles inicial y primario, todas las
comodidades que necesitamos para poder trabajar los docentes”, indicó.
Y agregó: “Lamentablemente seis años después, el Río Pilcomayo nos jugó
una mala pasada, precisamente el 16 de febrero de 2018, las aguas rompieron
las barreras de contención y a partir de ese día, nos quedamos sin nada”.
En ese marco, el docente contó que la comunidad y la institución educativa se
trasladaron a un Centro de Solidaridad cerca de Pozo de Maza sobre la Ruta
N° 39, en un territorio prestado por los originarios Wichí.
Luego, por gestiones del intendente de Pozo de Maza, Adolfo Pérez y al
Ministerio de Cultura y Educación, a través de la Delegación Zonal Matacos,
el Ministerio de la Comunidad, construyó módulos donde los maestros podían
desempeñar su labor.
Las diversas comunidades se trasladan temporalmente de un lugar a otro y los
distintos actores educativos con compromiso y responsabilidad se adaptan a la
realidad, priorizan la educación y construyen estrategias educativas para
abordar la diversidad de los contextos y garantizar una formación integral.
“Nosotros siempre respetamos su cultura, su tradición, ellos son originarios
que buscan sus tierras, sus alimentos, y el maestro va detrás de ellos, quién
más que nosotros que conocemos nuestras comunidades”, manifestó; y
declaró: “Yo hace 14 años que convivo, trabajo con ellos, mi escuela se
dividió en tres lugares porque son familias que fueron buscando su espacio
para vivir allí”.
En ese sentido, Cortez aseveró que “no perdemos la esperanza como
formoseños que somos” que tendrán su escuela, con todas las comodidades y
la vivienda incluida.
“A nosotros nunca nos soltó la mano el Gobernador siempre el Estado estuvo
presente en el lugar que fuimos, al que nos tocó ir detrás de nuestra gente, de
nuestros niños, el agua nos quitó todo, pero cuando fuimos al Centro
Solidaridad de ubicación transitoria de familias tuvimos luz, agua, wifi”,
precisó.
Y detalló: “Soy una docente que recorro camino a camino, es mi trabajo, pero
a la vez doy gracias a Dios de un gobierno presente, a mis comunidades llegan
las cajas de alimentos, la leche para los niños, de salud, si nos quieren venir a
mostrar otra realidad no es la nuestra, la nuestra es otra”.
También señaló que, hace 14 años convive con las comunidades originarias,
respetando su cultura y “me encanta hacer el bien”.
Estigarribia, por su lado, explicó que, en 2019 cuando bajaron las aguas, la
comunidad se trasladó a otro lugar cerca del bañado donde estaban ubicados
antes; y que la escuela acompañó esta mudanza, gracias a la intervención del
municipio que realizó nuevos módulos para llevar a cabo sus tareas.
“Y en el año 2020, debido a la pandemia, los docentes han estado trabajando
prácticamente en cada casa de los alumnos. Ahora, en este 2021, nuevamente
la comunidad se ha trasladado a otro lugar cerca de la nueva comunidad El
Churcal donde pareciera que ya se van a establecer, los docentes, la escuela se
ha mudado nuevamente junto con la comunidad a ese lugar”, resaltó.
Y continuó: “Hace unos días atrás, el gobierno ya ha entregado algunas
viviendas, también tenemos energía eléctrica y nos están haciendo una planta
de agua potable”.
Ante esta emergencia, el Gobierno Provincial, de manera rápida y en un
trabajo conjunto con todos los organismos, reubicaron a sus habitantes en
tierras prestadas por la comunidad Wichí de El Quimil, Pocitos, lugar al que
denominaron Centro «Solidaridad» de ubicación transitoria de familias, donde
se pusieron en funcionamiento las Escuelas de Educación Primaria (E.P.E.P.)
N° 76 de La Rinconada, 389 de El Churcal, 485 de Pozo Ramón, anexo Tres
Yuchanes E.P.E.P. N° 485 y la Escuela Agrotécnica Provicial (E.A.P.) N° 9,
el centro de salud y la policía.
Para finalizar, la Delegada Zonal de Matacos, Patricia Anriquez, expresó:
“Actualmente, los niveles Inicial y Primario, están funcionando en módulos
que año a año se acondicionan para que funcionen las escuelas, ya que las
comunidades se fueron trasladando de un lugar a otro”.
Y concluyó: “Ahora, que ya están establecidos y organizados nuevamente
como comunidad, estamos trabajando en forma conjunta con el Ministerio de
Cultura y Educación, con todo el relevamiento de datos, en cuanto a
ubicación, matrícula de alumnos para la construcción de espacios físicos de
aquellas escuelas que sufrieron las consecuencias de la crecida del Río
Pilcomayo”.