El doctor Mario Romero Bruno, director del Hospital Central y médico epidemiólogo del Consejo de Atención Integral de la Emergencia COVID-19 “Dr. Enrique Servián” se refirió a la situación epidemiológica respecto al avance de vacunación en Formosa.
En esta línea expuso que con el Plan Estratégico de Vacunación la provincia decidió comenzar con la inoculación a adultos mayores para luego ir disminuyendo las edades y en la continuidad de esta planificación, tener en cuenta a las personas con factores de riesgo, abarcando incluso a las personas de hasta 18 años.
“Se aplicaron en Formosa más de 190 mil dosis, con la idea de abarcar a la mayor cantidad de población con la primera dosis, para luego reforzar con la segunda” sostuvo en declaraciones a Agenfor.
Asimismo con respecto al gran número de fallecimientos de jóvenes dados últimamente, explicó que se debe a tres factores, en primer lugar la vacunación a mayores de 60 años, luego porque son los más expuestos por sus distintas actividades y el tercer factor tiene que ver con la cepa, en este caso la Manaos, que es de mayor transmisibilidad y agresividad, afectando sobre todo a los jóvenes, lamentándose últimamente fallecimientos de este grupo o en su recuperación, las secuelas como ciertas limitaciones físicas.
Por eso insistió en que la vacuna no previene la enfermedad, lo que previene es la hospitalización, el estado grave y la disminución de mortalidad, remarcando que debe estar acompañada por medidas sanitarias que logren disminuir la circulación, reuniones sociales y contactos entre las personas.
“Estamos en un nivel muy alto de positividad y para lograr normalizar la situación se deben dar menos de cien casos durante 14 días” aseguró.
Secuelas por COVID-19
En relación a los efectos que causa el coronavirus en los pulmones, aseveró que es una enfermedad que deja secuelas con daños pulmonares muy graves.
Y agregó que las personas que han tenido una neumonía necesitando asistencia respiratoria mecánica y luego, con fortuna, lograron sobrellevar la enfermedad, quedan durante un tiempo con ciertos padecimientos “que aun estamos aprendiendo”, necesitando una rehabilitación, señaló.
“Estamos avanzando en poder darle una mejor calidad de vida a las personas que ya han tenido esta enfermedad” estimó, ya que las consecuencias del coronavirus permanecen luego de un tiempo, como las dificultades respiratorias, destacando que en el Hospital Central permanecen internadas aproximadamente 10 o 15 personas que ya han transitado su cuadro agudo, pero que aún no les permite continuar con su vida “normal”.
Avance en la vacunación
El especialistaexpresó que por el gran avance en la vacunaciónantes de octubre toda la comunidad objetivo estaría vacunada, “confío y tengo fe de sea así” anheló.
Aseveró queesto seríaasí porque hay una decisión, desde el primer día por parte de un gobierno,de optimizar la adquisición de vacunas.
“El porcentaje de la población objetivo vacunada es de aproximadamente el 30%, si se tiene en cuenta la población mayor a 18 años” indicó.
Al cerrar, para llevar tranquilidad a la población hizo hincapié en que, si bien existen algunos temores sobre la vacuna AstraZeneca por la aparición de trombosis en ciertas personas, no se ha determinado que sea algo generalizado, por eso permanece su autorización para seguir aplicándola, resaltando que hay una vigilancia epidemiológica permanente de las vacunas y sus efectos adversos.