Resaltan las bondades nutritivas que tienen para la salud
En nuestra zona geográfica, el verano se caracteriza por la presencia de frutos autóctonos de estación, con excelentes propiedades nutritivas que aportan importantes beneficios a la salud.
Frente a la oportunidad de adquirirlos fácilmente, desde el Ministerio de Desarrollo Humano, recomiendan aprovechar las bondades de estos alimentos naturales, como por ejemplo el mango y la guayaba, entre otros de riquísimos sabores, aromas y colores.
Entre sus componentes se destacan una amplia cantidad de nutrientes: vitaminas, minerales y fibras, recomendados para el consumo de personas de todas las edades.
Por ejemplo, las vitaminas A, B, C y E, poseen cualidades antioxidantes que retrasan el envejecimiento, reducen factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares, degenerativas y ciertos tipos de cánceres.
Disminuyen, asimismo, los niveles de colesterol, contribuyen a la formación de glóbulos rojos y al crecimiento de los huesos y dientes, ayudan a absorber el hierro de los alimentos y refuerzan el sistema inmunológico frente a las alergias e infecciones.
Por su parte, tanto el mango como la guayaba tienen un contenido calórico considerado de bajo a moderado, pero cuentan con un alto contenido en fibras que favorece a las personas con presión arterial y niveles de glucosa elevada, entre otros atributos. Además, aportan al organismo una gran cantidad de agua, sobre todo la guayaba, requerimiento ideal para los días de calor.
¿Cómo consumirlas?
Estas frutas pueden consumirse en distintas preparaciones, solas o acompañadas de otros alimentos o combinadas también con otras frutas. Por ejemplo en postres, en forma de ensaladas, mousse o cremas, licuados, mermeladas, dulces y compotas. También en tartas y tortas frutales.
Sin embargo, los especialistas recomiendan comerlas al natural, peladas o con cáscara, según la preferencia de cada uno, para no alterar con la cocción ninguna de sus propiedades y aprovechar al máximo todos sus nutrientes.
Por estos motivos, insisten en incorporarlas a la dieta diaria, sobre todo porque en nuestra provincia, en el verano, podemos encontrar estas frutas en cualquier lugar.
Posiblemente, si no las tenemos en nuestra propia casa, seguramente podemos encontrarla en la casa de algún vecino o familiar, o lugares cercanos que nos permite tenerlas al alcance la mano y sin necesidad de gastar dinero.