La obra estaría terminada para febrero del año próximo, aunque presumen que podría ser antes.
Se refirió al tema, el jefe de la obra, ingeniero Rubén Héctor Polichuk, de la empresa Carranza, quien informó a Agenfor que “estamos en un 52% de avance y el plazo es de 24 meses”, asumiendo que “terminaríamos en teoría para febrero del 2023”.
Sin embargo, pronosticó que “creo que los vamos a hacer un poco más rápido”, estimando para los meses de octubre o noviembre.
En cuanto al avance, señaló que “estamos trabajando en los dos frentes en los tramos 1 y 2”, puntualizando que hicieron 32 vigas, 34 ya se tesaron e inyectaron y están previstas montarlas en el mes de marzo.
Para el tercer y cuarto tramo, el responsable indicó que “estamos terminando cerca de 25 vigas y el tesado e inyección también se haría en el mes de marzo”, mientras que en abril-mayo “ya tendríamos el puente montado con las vigas, arrancando con las prelosas y losas superiores”.
Además, explicó que se está trabajando en los muros de tierra armada en los tramos 1 y 2 y el movimiento del suelo. En cuanto a las pilas en la rotonda, tienen la dos totalmente armadas y se está avanzando en la tres, que es necesaria para montar los dos primeros tramos.
Respecto a las dimensiones del puente, detalló que “tiene 108 metros, más los accesos de tierra armada compuesta por 17 vigas por tramo, con un total de 68”. El ancho es de 24 metros, con dos carriles de ida y dos de vuelta, separados con un cantero central.
Por último, Polichuk, afirmó que “cumplimos con las reglamentaciones de Vialidad Nacional”, indicando así, que en la rotonda tiene seis metros de altura, teniendo en cuenta que deben pasar las cargas más altas.