En el marco del acuerdo al que llegó el gobierno nacional con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por el préstamo Stand by que tomó la gestión anterior, en 2018, el economista Adrián Muracciole destacó que “es una buena noticia para nuestro país”.
“Porque con este acuerdo evitamos caer en default, dejamos de perder reservas y más importante aún, vamos a poder seguir creciendo después de cinco años nefastos para la economía argentina, producto de las políticas neoliberales de Macri y el coronavirus”, fundamentó.
Sobre los beneficios del acuerdo, el docente universitario sostuvo que “básicamente, el acuerdo implica que lo que debíamos pagar en 2022 y 2023, que resultaba imposible de hacerlo para la Argentina, con este acuerdo lo vamos a pagar en 10 años, con 4 años y medio de plazo”.
Y profundizó: “Es decir, vamos a empezar a pagar en 2026, lo cual nos da cuatro años para crecer, crear empleo, aumentar los ingresos reales de trabajadores y jubilados y con ello, generar saldos para pagar la deuda”.
Además, Muracciole destacó que “para 2022, vamos a tener un crecimiento de las reservas del orden de los U$S5.000 millones que va a fortalecer nuestro sistema monetario”.
Conjuntamente para el especialista, el gobierno nacional “evitó se concreten las intenciones de quienes quieren a la Argentina hiperendeudada, que es destruir nuestra moneda, sobrevaluando el dólar para quedarse así con nuestras empresas públicas y nuestros recursos naturales a un precio vil, para luego dolarizar la economía y controlarnos desde afuera”.
“Por eso, más allá de los efectos a corto plazo respecto al dólar y la inflación al sortear el default, lo más importante de este acuerdo fue evitar el mal mayor a largo plazo, que es que Argentina se quede sin moneda, sin sus recursos naturales, sin nuestras reservas de agua, sin nuestro petróleo hoy en manos de YPF, sin nuestro Banco Nación y sin posibilidad de hacer política monetaria. Querían que perdamos nuestra soberanía y eso es lo que frenó el Gobierno Nacional”, explicó.
Asimismo, agregó que el acuerdo prevé “ir bajando la inflación, un fenómeno multicausal que lleva ya muchos años en la Argentina”.
“Como la suba de precios depende del valor del dólar, las tarifas, la tasa de interés y el déficit, el acuerdo no implica ni un tarifazo, ni la suba de la tasa de interés que frene la inversión, ni devaluaciones bruscas, ni frenar la obra pública que está creando empleo, a la vez que requiere de una reducción del déficit fiscal progresivo, que no signifique un ajuste para los trabajadores ni los jubilados. Resumiendo, el acuerdo implica hacer todo lo contrario a lo que hizo Mauricio Macri cuando fue presidente”, remarcó.
Por otro lado, Muracciole asumió que “aunque el acuerdo también significa que el FMI realice monitoreos trimestrales, esta vez el organismo abandona esa mala costumbre que tenia de exigir ajustes”.
A la vez que analizó que “esto se debe a que el FMI reconoció que el préstamo que le otorgó a Macri fue un fracaso rotundo, con consecuencias nefastas para la Argentina, violando su propio estatuto porque financió fuga de capitales y creo que también un poco reconociendo que el préstamo del FMI fue más político que económico ya que el poder financiero internacional buscaba la reelección de Macri para que en la Argentina continue la timba financiera que tanto daño nos hizo”.
Añadió el economista que “este acuerdo ira al Congreso y eso también marca una diferencia sustancial. Mientras que Macri nos endeudó de la noche a la mañana, sin consultarle a nadie, ni siquiera a sus socios de la UCR que jamás cuestionaron el feroz endeudamiento ni su uso espurio, Alberto Fernández envía el acuerdo al Congreso para que sea ratificado”.
“Espero que la oposición, cómplice de incendiar el país junto a Macri, este a la altura de las circunstancias y no obstaculice el tratamiento en el Congreso, y de esa manera le tire piedra a los bomberos que estamos apagando el incendio que dejaron”, expresó.
Destacó el especialista que “una vez más, como solamente lo hicieron Perón y Néstor Kirchner en nuestra historia, nuevamente un presidente peronista encara un proceso de desendeudamiento, honrando los compromisos del país y solucionando un lastre que nos deja un gobierno de derecha”.
Finalizó Muracciole reflexionando que “la deuda externa ha sido la mayor causa de nuestros problemas económicos desde la Dictadura Militar”.
“Ojalá este sea el último episodio nefasto con respecto a este tema y así como le dijimos Nunca Mas al terrorismo de Estado, le digamos Nunca Mas al neoliberalismo que la dictadura instaló en la Argentina y que lastimosamente tuvo un episodio democrático con Juntos por el Cambio que demasiado daño nos hizo”, concluyó.