El gobernador Gildo Insfrán encabezó este jueves 24 de marzo, en el Teatro de la Ciudad, el acto conmemorativo del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, en homenaje a las víctimas de la última dictadura cívico-militar que usurpó el poder entre 1976 y 1983.
El primer mandatario provincial estuvo acompañado por el jefe de Gabinete de Ministros, el doctor Antonio Ferreira; ministros del Ejecutivo, diputados nacionales y provinciales, funcionarios del Gobierno provincial y familiares de víctimas del terrorismo de Estado.
En el inicio de la ceremonia se entonaron el Himno Nacional Argentino y el Himno Marcha a Formosa que fueron interpretados por María Fretes, estudiante del Profesorado de Música del Instituto Superior de Arte “Oscar Alberto Albertazzi”.
A continuación, el profesor Juan Eduardo Lenscak, expreso político durante la última dictadura militar, actual titular de la Cátedra Abierta de Derechos Humanos de la UNaF, dio lectura al pronunciamiento de los organismos de derechos humanos.
Luego brindó su testimonio como víctima del terrorismo de Estado el historiador y escritor Sergio “Lilo” Domínguez, y expuso el abogado Dardo Williams Caraballo, querellante en causas de lesa humanidad en Formosa.
Tras ello se proyectó un audiovisual de la Federación de Centros de Estudiantes Secundarios (FeCES), con reflexiones de jóvenes alumnos de instituciones educativas de la provincia que participaron de los talleres alusivos al Día de la Memoria.
Seguidamente, se dirigió a los presentes el ministro de Gobierno, Justicia, Seguridad y Trabajo, el doctor Jorge Abel González.
“Después de dos años volvemos a encontrarnos, en los que nos hemos extrañado y donde no pudimos tener este contacto cara a cara, lo que de ninguna manera significó olvidar el sentido profundo de este acto colectivo que representa hacer juntos memoria para saber de dónde venimos, mantener la confianza en el presente que estamos construyendo juntos y para mirar con esperanza el porvenir que hemos de construir, porque depende de nosotros”, expuso el funcionario.
Aseveró que “este acto colectivo de la memoria no es simplemente hacer catarsis, el sentido es que las palabras silenciadas vuelen al viento y como semillas caigan en terreno fértil, para que desde ese lugar fructifiquen y generemos conciencia”.
“Este acto nos permite ejercitar juntos la escucha para poder comprender un tiempo histórico determinado, una situación histórica, un fotograma de una gran película que sin embargo marca el hoy y también el futuro –sostuvo-. Porque aquellos hechos que conmemoramos este 24 de marzo no fueron una acto que haya surgido por una coyuntura de ese momento, sino que es la continuación histórica de una lucha permanente que se ha dado en esta tierra y que implica la construcción de una Patria para todos y todas o la construcción de un Estado al servicio de una pequeña minoría”.
A su vez, al aludir a los juicios de lesa humanidad, puso de resalto que “en muchas provincias se ha intentado, pero en la única en la que se logró condenar a un gobernador de la dictadura militar fue en Formosa”.
“Y la primera provincia que ha de sentar en el banquillo de los acusados para que tengan la justicia que ellos negaron a su pueblo, y nos estamos refiriendo a quienes fueron miembros del Superior Tribunal de Justicia, indignos jueces de la dictadura, es también Formosa. Eso habla de quiénes somos los formoseños y las formoseñas. No nos van a quitar el precio, nosotros y nosotras valemos por lo que somos”, exclamó categórico.
Reflexión y memoria activa
En ese marco, en declaraciones recogidas por AGENFOR, la subsecretaria de Derechos Humanos, la doctora Silvina Aráuz, manifestó: “Esta es una jornada de reflexión y de memoria activa. Recordar, pero también reflexionar sobre nuestro presente y por qué no proyectar un futuro”.
Marcó que “la memoria debe atravesar la mente y el corazón”, porque “debemos ser conscientes de dónde venimos, cuál es nuestra historia argentina y formoseña, tener un pensamiento crítico de nuestra realidad y desde ahí transformar y rescatar los valores d estas personas que estuvieron pensando siempre en una construcción solidaria y colectiva”.
“Tenemos que tener claro que la democracia la construimos todos los días, es algo que por ahí lo creemos naturalizado y no es así. La construimos entre todos”, acentuó la funcionaria.
A su turno, la diputada nacional del Frente de Todos-Formosa Nelly Daldovo manifestó: “Es un día para decir gracias Dios por ser sobreviviente y por vivir a esta Formosa de hoy”.
“Fuimos víctimas de este proceso militar iniciado aquel 24 de marzo de 1976 por haber creído firmemente y haber tenido convicciones de que el que más necesitaba, en mi caso el campesinado, tenía que vivir dignamente”, enunció la legisladora nacional. “Lo único que hicimos fue organizarnos para que el pequeño productor agropecuario, en esa época decíamos el campesino, viva un poco mejor”, enfatizó.
Deuda externa
Por su parte, según recabó esta Agencia, el profesor Lenscak afirmó: “Es bueno que hagamos memoria sobre lo que ha sucedido porque los pueblos que olvidan están condenados a cometer los mismos errores. Entonces, esta práctica, este ejercicio de la memoria es importante”.
Planteó que “los militares no fueron loquitos de la guerra que hicieron el desastre, la masacre y el genocidio que hicieron. Tenían un objetivo que era el plan económico, lo cual se plasmó también en una deuda externa que por la Justicia argentina fue declarada delito. ¿Quiénes eran los delincuentes declarados? Los que nos gobernaban en ese entonces, o sea la pata civil de la dictadura militar. Uno de los apellidos era de las empresas Socma (propiedad de los Macri)”.
“Pero prescribió la causa –indicó-. Eso no significa que no nos haya dejado semejante muerto que fue la primera deuda de los militares que terminó pagando Néstor Kirchner. Esos vástagos de aquella dictadura son los que en este momento nos enterraron con una deuda externa de 44 mil millones de dólares que es totalmente impagable y que se la fugaron”.
Testimonios
En tanto, el director de Promoción y Protección de los Derechos Humanos de la provincia, José Saavedra, sostuvo que aquel 24 de marzo de 1976 cuando asume el poder el denominado Proceso de Reorganización Nacional encabezado por la Junta Militar, “se vivió con mucho miedo”.
No obstante, repasó que en la historia argentina “desde tiempos de Hipólito Yrigoyen en adelante que veníamos de dictadura tras dictadura y a mí me tocó padecer la de Juan Carlos Onganía en el ‘69. Después hay un paréntesis de democracia, pero ya en el ‘75 me volvieron a secuestrar dos años en la U7”.
Como expreso político lo que “tratamos fue de impedir que sometieran al pueblo” desde el lugar de la resistencia, aseguró. Y comentó que “entre los interrogatorios me preguntaban por qué arriesgaba mi vida, a lo que le contestaba que era para salvar a mi Patria y para el futuro de mis hijos”.
Por tanto, a 46 años del último Golpe de Estado, pidió un reconocimiento a todas las víctimas del terrorismo de Estado: “A los que desaparecieron, a los que sufrieron la cárcel y a los familiares: esposas, hijos y padres que también padecieron las consecuencias de la dictadura”, en razón de que “ellos son los héroes de este 24 de marzo”, resumió en pocas palabras.
También dejó su testimonió a AGENFOR Paula Oviedo, hija de Fabián Oviedo, otro militante peronista desaparecido en el ‘76, quien señaló que “lo que se vivió en esa época fue una terrible persecución, hostigamiento, y todo lo que nadie puede imaginarse ahora en plena democracia en el dolor que sufrimos los familiares”.
Asimismo, la diputada nacional por el Frente de Todos-Formosa, la doctora Graciela Parola, rescató la importancia del Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia “para no dejar que se olvide esta página negra de la historia argentina”.
“Más todavía cuando hay ideologías que buscan borrarla, porque sabemos muy bien que en nombre de la libertad se han cometido los peores crímenes de la lesa humanidad en el país y en el mundo”, profundizó.
Apuntó que “hoy también quizás con otros medios y otras armas han intentado en nombre también de la libertad atentar contra la vida del pueblo y han utilizado y vilipendiado todo lo que es la política de derechos humanos que lo hemos vivido en carne propia en Formosa cuando comparaban las medidas sanitarias con las medidas de la dictadura”, reprobó tajante la legisladora.
Y por eso mismo “debemos brindarle claridad a nuestra juventud, a nuestros hijos y nietos para que puedan seguir defendiendo esta política de derechos humanos y mantener siempre viva la memoria de lo que nos costó vivir hoy en democracia”, remarcó.
A su turno, Carlos Sotelo, titular del Instituto PAIPPA, acompañando también el acto, consideró que lo que se busca es “preservar la memoria de todos los hechos desgraciados que ocurrieron en la Argentina” entre 1976 hasta la vuelta a la democracia en el 1983.
“Es nuestra obligación alzar la voz por aquellos que no están”, esbozó y agregó: “Es una realidad que nos va a dolor siempre, pero hay que recordar a los compañeros y compañeras y en ese sentido esta conmemoración es justa en tener presente a los 30 mil desaparecidos”.