Como ocurre cada viernes, se llevará a cabo la feria franca del Instituto PAIPPA, en su nuevo horario, a partir de las 7 de la mañana, el cual ha sido definido en consenso con los pequeños productores debido a la temporada de otoño-invierno
Es así que en su único lugar de venta habilitado por el momento, el punto ferial del barrio La Paz de la ciudad de Formosa, se ofrecerá “una gran variedad de productos, que van desde verdeo, cucurbitáceas, mandioca, etcétera”.
Así lo indicó a AGENFOR el técnico en Agronegocios, Pablo Ortiz, coordinador de las ferias paipperas, quien dijo además que en el caso puntual de la mandioca, “es lo más demandado, ya que en el frío se comienza con las comidas más calóricas como la buseca, el locro y otros platos”.
A su vez, recordó que como se están haciendo refacciones en el edificio del organismo, en la calle Padre Grotti 1040, ocupando el playón donde se suelen ubicar los productores con materiales de construcción. Debido a ello “la actividad de comercialización sigue suspendida”.
No obstante, marcó que “estas obras mejorarán la atención a los clientes al igual que para los feriantes” cuando dicho lugar sea habilitado.
Inyección anímica
Por otro lado, también se refirió al Programa Soberanía Alimentaria Formoseña, valorando que su implementación significó “una inyección anímica” para las familias, ya que “si bien son acciones conjuntas con el PAIPPA, ellos van un poco más hacia adentro en el sentido de recuperar a algunos pequeños productores que no pueden llegar por sus medios a la ciudad capital y son los que siempre vendieron desde sus casas”.
Además, “por la pandemia, se hizo todo aún más dificultoso para ellos, entonces ese programa dio esa gota de incentivo al productor, para que pueda producir durante todo el año, bien variado”, lo que a su modo de ver “ha sido un gran acierto”, subrayó categórico.
De ese modo, se abrió un abanico tanto para los de capital como para el interior. “Así, según la estación del año va rotando la producción” de los alimentos, sin pasar por alto que el hombre y la mujer de campo “hace dos años vienen peleando con la sequía”, pero “sabemos que siempre enfrentan la adversidad”.
Y para finalizar remarcó que desde el Instituto, “siempre estamos acompañando justamente porque este es un organismo que cuenta con varias áreas: desde lo productivo, insumos y capacitaciones”.
De esta manera, se puede ir respondiendo a las necesidades que se plantean. “A través de los promotores que hay en cada una de las localidades y trabajando en coordinación con los Municipios, además de facilitar los trámites que puedan necesitar hacer”, concluyó.