El reumatólogo Maximiliano Bravo se refirió sobre la enfermedad del lupus, indicando que “es autoinmune, crónica y multisistémica”.
Según datos recabados por la Agencia de Noticias Formosa (AGENFOR), el doctor informó que “no tiene cura, pero sí tratamiento” y remarcó que “el objetivo de los médicos es tratar de suprimir (dormir) la enfermedad y evitar brotes”.
“Como todas las enfermedades autoinmunes, tiene múltiples factores: genéticos, ambientales, infecciosos”, explicó y sostuvo: “En la mujer predominan mucho los estrógenos y es por esto que nueve de cada diez personas con lupus, son mujeres”, pero subrayó que “en el hombre, la enfermedad es mucho más agresiva”.
Asimismo, indicó que “una persona, genéticamente susceptible ante todos estos factores, desarrolla la enfermedad” y aseveró que “esta puede empezar de distintas formas, es decir, de manera leve, moderada o grave”.
En esta línea, dio a conocer que la estadística marca que el 80% de los casos detectados se dan en personas “entre 15 y 45 años de edad”, mientras que un 10% en niños y otro 10% en los gerontes”.
Además, señaló que “los síntomas más comunes son el dolor articular en las manos, en los pies, en las muñecas, en los codos, como así también el cansancio, la fatiga, cuadros de fiebre con origen desconocido y el rash malar”.
En referencia a este último, explicó que “es un compromiso cutáneo en la mejilla y en la zona de la nariz, que por lo general genera foto sensibilidad –cuando el paciente se expone al sol- generando que el brote sea más grande”.
Enfermedad multisistémica
Por otra parte, el doctor Bravo informó que el lupus “puede afectar el corazón, el pulmón, el riñón y cualquier otro órgano”.
Y expuso: “Cuando un germen ingresa a cuerpo humano (ya sea un virus o una bacteria), genera anticuerpos que funcionan como defensas del organismo, entonces, cuando vuelve a ingresar ese patógeno o infección ya lo reconoce y lo destruye. En el lupus sucede lo mismo, pero crea más anticuerpos que atacan al mismo organismo, agrediendo tejidos, articulaciones y los órganos”.
Insistió en manifestar que “no es contagioso”, pero advirtió que “tiene cierto carácter genético, es decir, si yo lo tengo, hay un pequeño porcentaje de que uno de mis hijos o alguien de la cadena familiar pueda desarrollarlo”.
“A veces, la palabra lupus genera miedo en las personas”, esbozó y aclaró que “no todos los lupus son iguales, ya que al igual que las otras enfermedades autoinmunes, la agresividad con la que empieza la enfermedad es la que da el pronóstico de cómo se va a comportar”.
“El lupus no limita la vida. La premisa médica es que, según el grado de la enfermedad, con el tratamiento y seguimiento adecuado, el paciente pueda hacer su vida normal”, cerró Bravo.