Se realizó en Clorinda, en el hospital “Cruz Felipe Arnedo”, mediante el equipo de aféresis móvil del Centro Provincial de Hemoterapia.
El Gobierno de la Provincia, a través del Ministerio de Desarrollo Humano y el Centro Provincial de Hemoterapia, continúa con la fuerte campaña de captación de donantes voluntarios de plaquetas por aféresis, a fin de poder tener en stock este componente sanguíneo, indispensable para la recuperación de la salud de muchos pacientes.
En este marco, una nueva colecta se llevó adelante en Clorinda, en coordinación con el servicio de hemoterapia del hospital “Cruz Felipe Arnedo” donde se dieron cita los donantes, oriundos de esa ciudad fronteriza.
Los procedimientos se realizaron a tres donantes y, además, se aprovechó la ocasión para captar nuevos donantes y así convocarlos para futuros operativos, una vez concluido el chequeo de los requisitos solicitados para este tipo de donación.
“Con cada donación nos sentimos contentos y agradecidos, porque sumamos plaquetas a nuestro banco y son muchos los pacientes que a raíz de las enfermedades que tienen, necesitan de las plaquetas para poder cumplir con sus tratamientos, mejorar su salud y poder así tener una mejor calidad de vida. Inclusive para muchos, las plaquetas son necesarias para salvar sus vidas”, aseguró la responsable del Centro Provincial de Hemoterapia, bioquímica Griselda Salinas.
Las plaquetas son necesarias e irremplazables para las transfusiones a pacientes con enfermedades oncológicas, linfomas, aplasias medulares, hemorragias severas, pacientes que reciben quimioterapia y trasplante de médula ósea, y pacientes con trastornos severos de la coagulación.
“Es por eso” dijo Salinas, que es un hemocomponente “de necesidad permanente” y la única forma de conseguirlo es por medio de la donación que hace una persona, porque no puede fabricarse ni obtenerse de otro modo. “Es para muchos un medicamento pero que no puede comprarse, solo adquirirse a través de la voluntad de alguien que quiere donar”.
Al concluir el operativo de extracción, agradeció a los donantes por “la solidaridad y empatía” demostrada mediante la voluntad de donar. También por colaborar y tener la paciencia necesaria que requieren los procedimientos “porque son más largos que una donación de sangre convencional, llevan su tiempo, alrededor de una hora. Y, de todos modos, las personas desean hacerlo y emociona su predisposición y compromiso”.